Un himno para el Mediterráneo desde Alicante

El ADDA acoge el estreno de la sinfonía "Mediterraneum", compuesta por Andrés Valero-Castells, que interpretará ADDA Simfònica - La partitura, encargada por Casa Mediterráneo, se entregará a los embajadores de los 23 países que se reúnen el sábado en Alicante

El compositor Andrés Valero-Castells y el director de Casa Mediterráneo, Andrés Perelló, con la partitura

El compositor Andrés Valero-Castells y el director de Casa Mediterráneo, Andrés Perelló, con la partitura / RAFA ARJONES

África Prado

África Prado

Casa Mediterráneo estrenará este sábado una sinfonía de cuarenta minutos que pretende ser "un homenaje a la Cuenca Mediterránea y a sus pueblos", que reúna la "sustancia" de un mar que baña más de veinte países de tres continentes con tres grandes religiones, ochenta y cinco lenguas y seis alfabetos. La obra se llama Mediterraneum, ha sido compuesta por el valenciano Andrés Valero-Castells y será interpretada por primera vez en el ADDA por la orquesta ADDA Simfònica dirigida por Josep Vicent. La pieza se presenta con motivo de la constitución del Consejo Diplomático de Casa Mediterráneo, que reunirá previamente el sábado a embajadores de 23 países -18 ya han confirmado su presencia- a quienes se entregará una partitura de la obra, con el deseo de que se convierta en un nuevo instrumento de hermanamiento y la interpreten en sus países.

"Sí, queremos que sea una especie de himno mediterráneo", ha declarado Andrés Perelló, director general de Casa Mediterráneo, tras indicar que esta institución pública quiere transmitir "amistad en tiempos revueltos" y "dar el mensaje de que a pesar de las diferencias religiosas o políticas, interpretamos algo juntos, que esta cuenca tiene mucho que ofrecer y decir al mundo frente al sonido de las armas".

El compositor de Mediterraneum, que empezó siendo una obra y acabó convertida en sinfonía, ha considerado "un gran honor" el encargo, que "no es un estreno al uso y trasciende por el nivel de repercusión internacional". Valero-Castells (Silla, 1978) ha indicado que músicas para el Mediterráneo "hay muchas", desde el pop hasta la música sinfónica, "pero esta está creada con una vocación clara de potenciar el hermanamiento y poner el acento en cosas como la ecología o la emigración".

Partitura de la "Sínfonía nº 7 Mediterraneum", que se estrena el sábado en Alicante

Partitura de la "Sínfonía nº 7 Mediterraneum", que se estrena el sábado en Alicante / RAFA ARJONES

Cuatro movimientos

La sinfonía se divide en cuatro partes o movimientos. El primero, titulado Cuna de civilizaciones, brinda una mirada retrospectiva al pasado común con cuatro referencias a las músicas más antiguas escritas en el Mediterráneo, localizadas en Egipto, Grecia o Turquía: el Himno Hurrita a la Diosa Nikkal (1.400 a.C.), los Himnos Délficos a Apolo (128 a.C.), el Epitafio de Seikilos (s. I d.C.) y el Himno de Oxirrinco (s. III d.C.)

El segundo, Tragedia de migrantes, apela directamente a la "desdichada tumba de personas" que es el mar común, con tres rutas migratorias donde cada año mueren más de 2.000 personas. "Es un drama continuo sobre el que estamos anestesiados y queremos poner el acento en sensibilizar sobre esta tragedia", apunta el autor, que hace un guiño a una canción de rock de José Luis Campuzano Sherpa (ex de Barón Rojo), titulada Sueños Ahogados.

La tercera parte, Utopía mediterránea, es la más descriptiva, donde el compositor ha querido dejar espacio a la esperanza y transmitir sonidos "como si estuviéramos mar adentro oyendo las caracolas", con música "muy suave" que invita a la reflexión "y a un optimismo utópico".

La última, Praderas de posidonia, se fija en esta joya ecológica, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que funciona "como un elemento natural fantástico que regenera la vida en el Mediterráneo" y el final será como una danza donde confluyen las cuatro partes.

Valero-Castells, que se ha pasado ocho meses componiendo la sinfonía, está "deseoso" de ver "cómo queda interpretada por ADDA Simfònica, una de las mejores orquestas que hay ahora en el estado español". El concierto será a las 19 horas y, dada la gran respuesta del público y la gente que ha quedado fuera, Casa Mediterráneo prevé repetirlo el próximo verano.

La intención es grabar en video del concierto y difundirlo para que se interprete por diferentes orquestas, al igual que la partitura final, que publicará la editorial Piles.

Andrés Valero-Castells, autor de la obra encargada por Casa Mediterráneo que se escuchará en el ADDA

Andrés Valero-Castells, autor de la obra encargada por Casa Mediterráneo que se escuchará en el ADDA / RAFA ARJONES

Reunión del Consejo Diplomático

Dieciocho de los 23 países han confirmado su presencia en la cumbre diplomática de Alicante, ha indicado Perelló, quien ha explicado que Argelia no acude por las "tensiones obvias" tras retirarse este país su embajador en España, y también Israel por coincidir con el sabbat, así como Mónaco y Montenegro.

El concierto pondrá punto y final a una jornada de trabajo en la que Casa Mediterráneo dará continuidad a su plan de internacionalización que tuvo en la Cumbre Euromediterránea (Eumed9), el pasado 9 de diciembre, con un almuerzo en su sede con los presidentes de los nueve países participantes.

A partir de las 15 horas del sábado, los diplomáticos convocados constituirán el Consejo Diplomático de Casa Mediterráneo y elegirán a cuatro miembros de su comisión permanente -el quinto será el decano de los embajadores, un puesto entre Líbano, Jordania y Marruecos-, un órgano que permitirá un contacto permanente con el cuerpo diplomático y que convierte a Alicante en "un referente en el Mediterráneo que nadie discute", ha indicado Perelló. 

Ese "feedback" permite tener una información de actividades permanente "y saber qué colaboración cultural, política y, especialmente, económica, podemos establecer desde Alicante (entiéndase festivales, foros gastronómicos, foros económicos...) con otros países y que Alicante sea un puente en el Mediterráneo".