Alicante quiere el maillot de líder en 2019, año en el que acogerá en agosto las tres primeras etapas de la Vuelta a España y en el que ayer dijo hasta pronto a una de las ediciones de la Volta a la Comunitat más ambiciosas.

Los vigentes campeones del Tour de Francia, del mundo y de Europa rodaron ayer por última vez por las carreteras de la provincia y la tercera etapa de la prueba ya arrancará hoy dentro de la vecina Valencia.

El éxito de convocatoria de ciclistas para esta 70ª edición de la Volta fue indiscutible y la presencia en el pelotón de Geraint Thomas, Alejandro Valverde y Matteo Trentin, primeros espadas absolutos del circuito internacional, es el mejor ejemplo.

De ello se congratulaba al término de la etapa de ayer, en plena avenida de la Estación, el director de la carrera Ángel Casero: «Queda demostrado que los ciclistas importantes que hemos logrado traer vienen a competir la Volta y eso le da un plus muy grande a la prueba». Casero, ganador de la Vuelta a España en 2001, confesaba que la organización trató de confeccionar una ronda «cómoda y con muchas variantes». «Queríamos que hubiera de todo, llegadas al sprint, crono y montaña y que los grandes ciclistas vinieran a disfrutar, competir y también entrenar», apuntó el director valenciano.

La ciudad, en medio mundo

En los prolegómenos de la etapa, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, reconoció el prestigio de la carrera y el impulso que le da a la ciudad. «La Volta es importantísima a nivel de imagen y de promoción y también de impacto económico directo», indicó el primer edil. La prueba, que generó 13 millones de euros en la edición de 2018, la verán este año 116 millones de personas por televisión, gracias a la retransmisión en directo de Eurosport.

Ese dato intercontinental tan rutilante contrasta, sin embargo, con un cierto pinchazo de afluencia de público en la etapa de ayer, que comenzó y terminó en el centro de Alicante. La condición inexorable de día laborable y un horario plenamente escolar (de 10 a 15 horas -como todas las etapas del mundo-) privó a la prueba de tener todavía más calor y color por las calles.

Sea como fuere, Alicante estuvo para bien en boca de los ciclistas que lideran el ránking internacional. El vigente campeón del Tour, el galés Thomas, que estuvo acompañado de varios compatriotas en la Rambla, ensalzó las condiciones de la ciudad: «Es un placer correr por Alicante con estas rutas y este clima».

La afirmación la secundaba minutos después el maillot arcoíris, un Alejandro Valverde que persigue su cuarto título en la Volta y el segundo consecutivo: «Es un orgullo rodar por Alicante, puedo estar entre los favoritos, pero somos 167 participantes».

La carrera sigue hoy por Valencia y Alicante descuenta páginas para que el mejor ciclismo regrese a sus carreteras. La Vuelta a España 2019 arrancará a finales de agosto en Torrevieja y estará tres días por la provincia.

Alicante no quiere bajarse del podio del ciclismo mundial.