El Iberostar Tenerife jugará por segundo año consecutivo las semifinales de la Copa del Rey después de derrotar a un decepcionante Unicaja Málaga (88-78) en el primer encuentro de cuartos de final de la competición que se disputa en el WiZink Center de Madrid. Los jugadores de Txus Vidorreta, como hicieron hace un año en Las Palmas de Gran Canaria, rompieron las apuestas ante un rival al que dominaron desde el minuto tres de juego.

La excelente dirección de Rodrigo San Miguel, el poderío interior de Colton Iverson, el mejor jugador del mes de enero en la Liga Endesa, y la aportación coral de un equipo que controló en todo momento el ritmo del partido permitirán a los canarios luchar por un puesto en la final ante el ganador del Barça Lassa-Valencia Basket.

Tim Abromaitis, con 9 puntos en el primer cuarto, y Rodrigo San Miguel abrieron el camino del triunfo en un primer cuarto donde el Iberostar llegó a dominar por 17-11 a un Unicaja que solo encontraba soluciones en ataque de la mano de un inspirado Jaime Fernández. Pero el escolta internacional era insuficiente porque el equipo insular, además, dominaba ampliamente el rebote (10 capturas por 3 de su rival en los primeros diez minutos).

Con 25-20 concluyó un primer acto que sacó a relucir los miedos de un Unicaja que se encontró con un chaparrón en el segundo período, instalándose la diferencia en la decena de puntos tras un triple de Abromaitis a 3:27 del final. La defensa condescendiente de los malagueños facilitaba el trabajo de un Iberostar, donde Ferrán Bassas asumía con acierto los galones mientras que Javi Beirán se encaraba de poner esa templanza que el capitán siempre aporta al juego de su equipo. Adam Wacynski, con un triple, alivió a un Unicaja que ya jugaba con urgencias (42-37), pero el arreón final antes del descanso dejó a los tinerfeños con 10 puntos de ventaja (44-36).

No encontró remedio Luis Casimiro a los males de su equipo con el paso por vestuarios, ya que el Iberostar, lejos de sufrir el miedo a ganar, se creció gracias a la inspiración de Nico Brusssino y al control de la situación desde el banquillo. Las diferencias fueron creciendo paulatinamente hasta llegar a disfrutar el equipo canario de una máxima de 15 puntos (66-51) justo al filo del final de un tercer cuarto descorazonador del Unicaja pese a los intentos de Dragan Milosavljevic y Salin.

Los verdes lograron recomponerse en el último minuto del tercer cuarto para llegar al final del mismo con 66-56, pero dando muestras de estar siempre a merced de un rival que encontraba soluciones a casi todos los problemas.

En el último cuarto, el Iberostar Tenerife se encargó de zanjar rápidamente el choque. Un triple de Brussino a seis minutos del final puso en el marcador un 77-63 que enmudecía definitivamente a la afición malagueña. Nada cambió pese a que el Unicaja trató de elevar la intensidad en defensa, pero la salida del tiempo muerto supuso el mazazo definitivo para los intereses malaguistas, que llegaron a acumular 16 puntos de desventaja (79-63). Ni siquiera una antideportiva de David White hizo tambalear al conjunto canario.

Un año después, Txus Vidorreta, que la temporada pasada cayó en los cuartos de final con el Valencia frente al Tenerife que entonces dirigía Fotis Katsikaris, se sacaba la espina y se metía en semifinales, aunque con otro equipo.

88 - Iberostar Tenerife (25+19+22+22): White (7), San Miguel (9), Beirán (10), Abromaitis (12) e Iverson (19) -cinco inicial- Staier (-), Richotti (-), Niang (4), Brussino (8), Bassas (16), Saiz (-), Gillet (3).

78 - Unicaja Málaga (20+16+20+22): Roberts (7), Fernández (13), Milosavljevic (16), Wiltjer (7) y Shermadini (8) -quinteto titular- Boatright (5), Salin (11), Díez (-), Waczynski (3), Lessort (3) y Suárez (5).

Árbitros: Juan Carlos García González, Emilio Pérez Pizarro y Jordi Aliaga. Sin eliminados.

Incidencias: Primera eliminatoria de cuartos de final de la Copa del Rey de baloncesto disputada en el WiZink Center de Madrid ante 9.318 espectadores.