El Alcoyano se mantiene firme al frente de la clasificación del grupo VI tras sumar un trabajado empate en el campo del Recambios Colón que, además, se vio acompañado del tropiezo del Intercity, su inmediato perseguidor, que se aleja a 11 puntos. La distancia con el quinto clasificado, el Alzira, es de 16 puntos.
Con todo, el duelo de ayer en Aldaia, presidido por la climatología adversa, estuvo marcado por las ausencias, una situación que precipitó el debut del recién fichado Mikel Solís y la incorporación en la convocatoria del defensa Galvañ para alcanzar la cifra de 17 efectivos. El Deportivo superó el escollo, pese a no ofrecer su mejor versión frente a un rival muy motivado e ilusionado con la posibilidad de infligir la primera derrota al cuadro entrenado por Vicente Parras.
Las reducidas dimensiones del campo sintético de El Perdiguer convirtieron el partido en una ida y vuelta desde el primer instante, beneficiando más los intereses del equipo local que avisó en primer lugar. El saque de esquina a la frontal del área lo enganchó Ballester obligando a José Juan a meter la manopla junto a la escuadra para desviar lo justo provocando un segundo córner. Este estuvo mejor defendido generando, además, un rápido contragolpe que Juli no acertó a culminar.
La réplica corrió a cargo de Javi García con un tiro al palo corto que otra vez José Juan, bien situado, desbarató. La lesión de Juli acarreó un nuevo contratiempo a Parras, obligado a reestructura el equipo con la incorporación de Jorge Moltó. Cuando la primera parte agonizaba llegó el mazazo. Nico se fue como una flecha por la banda derecha dejando atrás a Raúl González. El centro lo dejó pasar hábilmente Víctor y Nacho golpeó con fuerza con la pierna derecha clavando el esférico por toda la escuadra. Acto seguido, el colegiado decretó el camino del vestuario.
El marcador adverso espoleó al Deportivo que tiró de casta para tratar de evitar la primera derrota del curso. Juanma Acevedo sacó el primer córner que a punto estuvo de acabar en gol por la inseguridad de Joan Castanyer. Parras, condicionado por el estado físico de Óscar Díaz, tiró del joven Alejandro Peiró para acompañar en el ataque a Pau Franch. La decisión no pudo ser más acertada puesto que el futbolista de Canals puso las tablas en el marcador. Acevedo puso el balón en la frontal del área pequeña y Peiró, superando en el salto a Ballester, conectó un cabezazo inapelable lejos del alcance del portero. Javi García y Juanma Acevedo, protagonizaron sendos disparos ajustados al poste que podrían haber desequilibrado la balanza hacia uno u otro bando.
