La Bundesliga regresa este fin de semana con muchas miradas puestas en ella. La liga alemana calmará la sed de fútbol de los aficionados de toda Europa, a los que la pandemia del coronavirus condenó a revisionar partidos 'vintage', a la vez que marcará el camino para el resto de ligas que se preparan para retomar sus campeonatos. Medio centenar de folios recogen el detallado protocolo que el torneo germano ha elaborado para intentar que este regreso de la competición sea seguro y minimizar la posibilidad de contagios. Estos son algunos de sus puntos más relevantes, que en algún caso harán cambiar tradiciones de este deporte.

Máximo de 300 personas por partido

Los estadios se dividirán en tres zonas y en cada una no podrá haber más de un centenar de personas, entre jugadores, árbitros, cuerpo técnico, representantes de cada club, recogepelotas (solo 4 y de 16 años o más), periodistas (10), fotógrafos (3), personal médico, de seguridad y de limpieza, personal del VAR, bomberos, policías, jardineros y trabajadores de la televisiones con licencia. Un detallado planning horario explica en qué momento debe llegar cada uno a cada zona del estadio y en qué momento abandonarla.

Distancia de seguridad en el autocar

Los equipos deberán llegar en tantos autocares (debidamente desinfectados) como hagan falta para que puedan mantener un metro y medio de distancia entre sí. Para el conjunto local se recomienda la llegada en vehículo privado, pero queda prohibido compartir coche. Los dos equipos deben evitar llegar al campo al mismo tiempo.

Prohibido acceder con fiebre

Las 300 personas que accedan al recinto deberán pasar por un proceso de desinfección, responder a un cuestionario sobre posibles síntomas y tomarse la temperatura. Superar los 38º supondrá quedarse fuera, se trate de un recogepelotas o de Robert Lewandowski. Los que entren deben ser cuidadosos y no tocar botones, interruptores o manetas para minimizar el riego de contagio.

Rapidez en los vestuarios

Se recomienda habilitar otras salas para ampliar la zona de vestuarios y también cambiarse por grupos (porteros, titulares y suplentes). Hay que reducir el tiempo de estancia en los vestuarios al mínimo (entre 30 y 40 minutos, señala el protocolo). Todo aquel que esté en los vestuarios debe llevar mascarilla. Al pasar por el túnel deberá mantenerse la distancia de seguridad. La revisión del equipamiento (tacos y demás) la hará el árbitro asistente en la puerta de los vestuarios y con mascarilla.

Sin ceremonia previa

Prohibida la entrada de niños (también de mascotas, especifica el protocolo germano) para acompañar a los jugadores en la entrada al campo. De hecho, se prohíbe cualquier tipo de ceremonia, y por supuesto queda anulado el pasamanos. Tal cual salgan al césped, cada futbolista se debe ir a su posición para jugar, sin formar para la clásica foto. De hecho, solo habrá fotógrafos tras las porterías y en el lateral opuesto a los banquillos.

Suplentes con mascarilla

En el banquillo deberá asegurarse la distancia de 1,5 metros entre todos los miembros de los equipos (técnicos, médicos, suplentes), dejando si es necesario uno o más asientos libres entre cada persona. Si se requiere y es posible, se deben ampliar los banquillos o añadir asientos anexos. Excepto los 22 jugadores activos, el árbitro y sus asistentes, el resto deben llevar mascarilla durante el partido. Este mismo viernes, la Bundesliga ha eximido a los técnicos de su uso si se mantienen a 1,5 metros del resto de personas.

Desinfecciones constantes del balón

Los balones deben ser desinfectados antes y durante el partido. Lo mismo sucede con los vestuarios: cada vez que se usen, deberán ser limpiados y desinfectados. Habrá que cerrar las taquillas porque se recomienda dejar las puertas abiertas para evitar tocar manetas y para ventilar los espacios.

Rueda de prensa virtual

Tanto la zona mixta como la sala de prensa estarán cerradas. Las entrevistas postpatido serán virtuales, y cuantas menos mejor, según el protocolo. Habrá dos salas para el control antidopaje, una por equipo. Las zonas de spa deben estar cerradas. Las duchas de los jugadores deberán ser individuales o incluso aplazarlas hasta llegar al hotel o a casa.

Controles periódicos

La Bundesliga señala como "apropiado" la realización de tests PCR dos veces por semana y siempre lo más cerca del siguiente partido que sea posible. Además se prevén tests de anticuerpos para llevar a cabo un estudio científico.

Hoteles exclusivos

El protocolo recomienda que los equipos que se desplacen se hospeden en hoteles solo para ellos o, si no es posible, reservar un área o un piso para la expedición. Queda prohibido el uso de gimnasios, zonas wellness u otras zonas comunes. Fuera de la habitación (que no deberá limpiarse durante toda la estancia) es obligatorio el uso de mascarilla. Y al comer, mantener dos metros de distancia entre cada miembro de la expedición.