Por razones de seguridad epidemiológica, la Conselleria de Sanidad ha rebajado a 400 la cifra máxima de espectadores para el partido de presentación del HLA Alicante que tendrá lugar el próximo 8 de octubre en el Pabellón Pedro Ferrándiz frente al Canoe de Madrid, en el que será el primer partido con público del conjunto lucentino como local en esta pretemporada.
La entidad alicantina ha presentado un exhaustivo protocolo de seguridad sanitaria para intentar que en este partido de presentación y a partir del 18 de octubre, fecha en la que comienza la temporada en la Liga LEB Oro, el Pedro Ferrándiz pueda acoger hasta 1.300 espectadores, con lo que tendrían cabida todos los que han sacado su abono para la campaña 2020/21.
No obstante, las actual evolución de la pandemia ha llevado a las autoridades sanitarias a extremar el celo y reducir a la tercera parte el aforo previsto por el club lucentino para la puesta de largo ante su afición del nuevo proyecto de Pedro Rivero para esta segunda temporada consecutiva en la segunda categoría del baloncesto español.
«Vamos a seguir intentándolo durante todos los días, porque las decisiones y exigencias pueden cambiar, pero parece poco probable que se nos autoricen más de 400 espectadores para la presentación ante el Canoe», reconoció ayer Ignacio Marcilla, director de márketing de la Fundación Lucentum, que está convencido de que sí podrán llegar a las 1.300 personas cuando el HLA Alicante dispute sus primeros partidos de Liga como local a partir del 23 de octubre (20.45 horas) frente al Força Lleida.
«Hemos presentado un protocolo lo más exhaustivo posible que está estudiando ahora la conselleria para decidir si es compatible con la entrada al pabellón de hasta 1.300 seguidores», explicó Marcilla, que detalló que el plan de seguridad del Lucentum incluye desde la ampliación del número de puertas de entrada y salida para la afición (de dos a cuatro, más una quinta VIP), a un protocolo de acceso señalizado y escalonado de espectadores y jugadores, pasando por la desinfección de gradas y vestuarios y la designación de un delegado del cumplimiento de protocolo y un responsable de higiene para el seguimiento de la pandemia.
Además de la separación de un metro y medio del público en las gradas y del uso obligatorio de mascarilla, el club aumentará el personal de seguridad para el control de las gradas. No está permitida la apertura del bar, pero se prestará un servicio de venta de comida en el graderío al estilo americano, dado que los espectadores solo podrán moverse de butaca para ir al aseo. Además, el nuevo sistema de ticketing de la entidad lucentina permite disponer de la identidad de todos los asistentes a los partidos.
El equipo de Pedro Rivero disputa esta tarde (20.30, Alacantí TV) en Castellón ante el TAU su tercer amistoso de pretemporada tras sendas victorias ante el Jairis y Granada. El sábado volverá a jugar en La Nucía ante el Almansa.
