La tercera derrota del Alcoyano en los últimos cuatro partidos deja al equipo en una posición muy comprometida a falta de dos jornadas para el final de la primera fase de la liga y en el peor momento desde que Vicente Parras encabezó la pasada temporada el proyecto de devolver a los de El Collao a la Segunda B tras el descenso a Tercera División.

El Alcoyano sigue dependiendo de sí mismo para conseguir el billete de la Primera División RFEF pero en este tramo de liga ha dejado escapar una oportunidad inmejorable de certificar su segundo ascenso consecutivo cuando hace cuatro jornadas aventajaba en cinco puntos al Villarreal B y ahora le ha igualado a 25 puntos pero con el ‘goal average’ en contra y solo tiene por detrás al Hércules, pero ahora a un punto cuando antes lo tenía a dos por debajo.

El factor campo que el vestuario señaló como una de las claves para lograr el objetivo de terminar entre los tres primeros finalmente se le ha vuelto en contra y solo ha ganado uno de los tres encuentros que ha disputado en El Collao en el último mes. El equipo de Vicente Parras perdió 0-2 ante el Villarreal B y el domingo perdió 1-2 ante la Peña Deportiva y la única victoria fue ante La Nucía por 3-2 y con un gol en el tiempo añadido.

En estas dos jornadas que restan el Alcoyano quiere aferrarse al hecho de que aún después de esta mala racha de resultados, especialmente en casa, el equipo sigue dependiendo de sí mismo y ganando los dos partidos que le restan acabarán entre los tres primeros del grupo.

La primera final que le espera será este domingo en El Regit de Atzeneta, un campo en el que ganó la pasada temporada cuando ambos conjuntos estaba en Tercera, y despedirá la primera fase de la liga como local ante el Valencia-Mestalla, actual colista del grupo 3B.