Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

De la terreta al Olimpo del fútbol

Sandra Paños disputa hoy con el Barça la final de la Champions, en busca del primer título continental para un club femenino español - La portera puede convertirse en la tercera deportista alicantina en ganar el máximo trofeo europeo

Sandra Paños aplaude a la afición tras lograr el pase a la final de la Liga de Campeones. | FC BARCELONA

Pasión es la palabra de la temporada entre las mujeres en el fútbol. Con pe de Paños, la guardameta alicantina del Barcelona busca esta noche un hito para el balompié nacional, en la final de la Champions League contra el Chelsea (21 horas, GolTV). En caso de victoria, las azulgranas se convertirían en el primer equipo español capaz de conquistar el máximo trofeo continental en su versión femenina.

Sandra Paños busca poner su nombre junto al de las otras dos personas alicantinas que saben lo que es ganar una Champions o su versión antigua, la Copa de Europa. Curiosamente, el último en hacerlo lo logró en 1992, apenas unos meses antes del nacimiento de la portera. El benidormense Guillermo Amor, pieza clave del «Dream Team» de Johan Cruyff en el Barça, levantó la primera «Orejona» culé en Wembley, gracias al archiconocido gol de falta de Ronald Koeman en la prórroga frente a la Sampdoria. Dos años después, la versión final de aquel equipo legendario llegó otra vez a la final, esta vez en Atenas, pero el Milan de Capello les goleó (4-0).

Para encontrar al primer alicantino capaz de entrar al selecto grupo del Olimpo del fútbol continental hay que remontarse a la primera edición de la Copa de Europa, en 1956. En aquel pionero Real Madrid militaba el alcoyano José Luis Pérez-Payá. A la sombra de Di Stéfano, Rial, Gento y compañía, Pérez-Payá aparece en los libros de historia como uno de los integrantes del primer equipo madridista que jugó en la máxima competición continental, en el partido de ida de Octavos frente al Servette, con el dorsal «8» a la espalda. Fue su única aparición en aquel torneo.

Aparte de Amor y Paños, otros tres futbolistas alicantinos saben lo que es disputar la máxima final europea: «Lobo» Carrasco, Juanfran Torres y Saúl Ñíguez. Carrasco lo hizo con el Barça en 1986. El delantero de Alcoy vivió en primera línea el novelesco desenlace del torneo en Sevilla frente al Steaua de Bucarest, en un partido sin goles y con una tanda de penaltis en la que los azulgranas fallaron sus cuatro tiros.

Precisamente el punto de penalti fue la condena tanto para Juanfran como para Saúl. El crevillentino sufrió las dos dolorosas derrotas del Atlético ante el Real Madrid en 2014 y 2016, mientras que el ilicitano faltó en la primera. La crueldad del fútbol se cebó con los colchoneros en ambas finales, primero con el tanto de Sergio Ramos en el minuto 93 que forzó la prórroga y, dos años después, con la derrota por penaltis, con error final decisivo del propio Juanfran.

Ampliando el catálogo de títulos internacionales al resto de los torneos europeos, el fútbol alicantino ha celebrado otros trofeos. Juan Manuel Asensi, que se quedó con el Barça a las puertas de la final de la Copa de Europa en 1975, al caer en «semis» ante el Leeds United, ganó la Recopa de 1979, temporada en la que compartía equipo con Carrasco, que luego ganaría también las de 1982 y 1989, y con un inédito Félix Palomares.

Campeón histórico

Los atléticos Juanfran, Saúl y Antonio López tienen dos títulos de la Europa League cada uno (2012 y 2018 los dos primeros, 2010 y 2012 el tercero de ellos) y varias Supercopas. Amor, aparte del título ya mencionado, ganó la Recopa en 1989 y 1997 y una Supercopa. Con la zamarra del Valencia, Sempere levantó la Supercopa de la temporada 1980/81 y Rufete la Copa de la UEFA y la Supercopa en 2004. Además, este mismo mes de mayo, el noveldense Mario Gaspar jugará la final de la Europa League con el Villarreal.

A 90 minutos (120, si hay prórroga, algo más si hay penaltis) está Sandra Paños de ingresar en este Olimpo, en una final abierta e histórica, ya que coronará a un nuevo campeón y al primer club de fútbol que ganará la Champions tanto en hombres como en mujeres. Mismo deporte. Mismo título. Misma pasión.

Pioneras: Ocho mujeres ya saben lo que se siente al reinar en Europa

Reina de Europa. Ese es el distintivo que busca Sandra Paños y que, con anterioridad, ya hay otras deportistas alicantinas que han podido alcanzar. Entre los principales deportes de equipo, Maite Andreu tocó el cielo con el Mar Valencia en 1997, en la única vez que un equipo femenino español de balonmano ha conseguido ganar el máximo entorchado continental. En frontenis, Raquel Micó ganó 11 veces la Copa de Europa de clubes entre 2001 y 2013.

En deportes individuales, las judocas Miriam Blasco, Isabel Fernández y Yolanda Soler lograron a lo largo de sus carreras varias medallas de oro europeas. Blasco fue campeona en 1991, Soler tiene tres oros continentales consecutivos (1994 a 1996) y Fernández sumó hasta seis oros entre 1998 y 2007. Todas adornan su palmarés también con metal olímpico.

Laura Kim (taekwondo), Eva María Naranjo (kickboxing) y Asunción Limiñana (vela) también llegaron a ser las mejores de Europa. Kim ganó seis trofeos en modalidad de Poomsae (2011 a 2015), Naranjo consiguió cinco títulos continentales entre 2004 y 2008 y Limiñana triunfó en la Clase Vaurien en 2004.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats