Apenas 24 horas más tarde de redactar su despedida, Pedro Rivero se convirtió oficialmente en el nuevo entrenador del Palencia. El extécnico de la Fundación Lucentum, después de tres temporadas en Alicante, rechazó la oferta de renovación que le hizo el HLA y, tal y como advirtió INFORMACIÓN, se marcha al conjunto castellano, con el que firma por un año con prolongación automática en caso de ascenso a la Liga ACB, objetivo para el que se le contrata.
«Estoy muy contento de fichar por el Palencia Baloncesto. Es un club referencia en la categoría, un club ambicioso que siempre busca luchar al máximo y creo que es un momento importante para mí de crecimiento. Estoy deseando empezar ya a trabajar para confeccionar una plantilla muy competitiva y que seamos capaces de hacer un buen baloncesto este año», ha dicho el preparador segoviano en su llegada a su nuevo destino.
Palencia finalizó la última campaña undécimo, siete puestos por detrás del HLA, que concluyó cuarto tras caer con Breogán en el tercer partido de las semifinales por el ascenso, una serie eliminatoria para la que no se clasificó el cuadro palentino, noveno al cierre de la segunda fase a pesar de disponer de un presupuesto más alto. Pedro Rivero se convierte en el octavo entrenador que dirige al Palencia Baloncesto (CD Maristas), un club por el que ya han pasado técnicos como Natxo Lezkano, Porfirio Fisac, Alejandro Martínez, Carles Marco y otro exlucentino, Arturo Álvarez, de quien va a tomar el relevo el preparador segoviano.
Palentinos y alicantinos rivalizarán de nuevo como favoritos al ascenso. La directiva del HLA, que confiaba en que Pedro Rivero aceptara su propuesta de renovación, pero el exbase prefirió la fuerte apuesta económica que le garantizaba Palencia, que partirá con uno de los tres presupuestos más altos de la Liga, al margen de los recién descendidos, Estudiantes y Gipuzkoa Basket.
