Segundo día de competición y España afronta su primera final de fútbol. El empate en el debut contra Egipto (0-0) hace que el partido frente a Australia de este domingo (12:30 horas) se antoje clave para poder llegar a la última jornada como primera de grupo y dependiendo de sí misma, para lo que Luis de la Fuente habrá cambios.

Ganar a los australianos dejaría a España primera antes del partido contra Argentina. Empatar podría hacer que se mantuviera segunda en caso de que se de el mismo resultado entre Egipto y Argentina, si no, fuera de los puestos que dan acceso a cuartos; igual que en caso de perder. Situación imprevista para la, a priori, gran favorita a hacerse con la medalla de oro en el torneo de fútbol. Dani Ceballos será baja por un esguince de tobillo. Tampoco estará Óscar Mingueza, con molestias musculares en los isquiotibiales de la pierna izquierda. Cambios obligados por lesión, y los habrá también porque el equipo necesita piernas frescas. Luis de la Fuente recupera a Zubimendi, jugador de confianza para el pivote defensivo, tras superar molestias. El seleccionador español maneja la opción de meter a Carlos Soler, que jugó 25 minutos buenos frente a Egipto y anotó en el amistoso contra Japón, con Zubimendi como ancla y Pedri más liberado.

Por Mingueza, el elegido será Óscar Gil; recambio natural. El resto atrás no se tocan y habrá que ver arriba. En el estreno salió con falso ‘9’, pero Rafa Mir demostró tener oportunismo, y la que tuvo contra Egipto en el 87, un cabezazo a bocajarro en el área pequeña, no la fallará todos los días. Ahí estaría el cambio de sistema en busca del gol. 

En los costados, Bryan Gil se antoja como una buena opción para, con su energía habitual, revitalizar el equipo; por Asensio o Dani Olmo. Con estas dudas, y con Luis de la Fuente confirmando que hará cambios, se presenta España ante un combinado australiano que viene con la moral por las nubes tras ganar 0-2 a Argentina. Sin complicaciones y con un plan que repetirá este sábado: 4-4-2 y intentar generar peligro en los contragolpes con balones al espacio. Con Daniel Arzani, perteneciente al Manchester City, y Lachlan Wales como puñales por banda.