El Alcoyano continúa con su gran arranque de temporada y después de dos empates consecutivos, ayer volvió a conseguir una victoria en su visita al campo del Sevilla Atlético. El conjunto de Vicente Parras ha sumado ocho puntos de 12 posibles en las primeras cuatro jornadas del campeonato y se mantiene invicto en la nueva Primera RFEF.
Esta vez, su víctima fue el filial sevillista, que tuvo momentos de altibajos durante todo el partido y que mostró claras carencias ofensivas y graves errores defensivos. El equipo de Alcoy supo leer muy bien el partido y supo cómo actuar en cada momento, incluso en los minutos en los que estuvo dominado por su rival, para acabar imponiéndose con claridad (1-3) en la Ciudad Deportiva Jesús Navas.
Los primeros minutos de juego fueron de posesión del Sevilla Atlético, aunque sin pasar de zona de tres cuartos, hasta que se produjo un penalti sobre Dani Vega, uno de los futbolistas más peligrosos del Alcoyano en el primer periodo, aunque fue de más a menos durante el encuentro. La estirada de Alfonso no evitó que la pena máxima lanzada por Jona Moreno entrara ajustada al palo para poner el 0-1 a favor de los visitantes.
En ese momento cambió el panorama. El Deportivo pasó a convertirse en el claro dominador del encuentro con un Dani Vega que se convirtió en una verdadera pesadilla para la defensa local con internadas por ambas bandas que generaban continuo peligro a un filial hispalense sin ideas.
Jona Moreno, otro de los grandes protagonistas del partido, tuvo en sus botas el segundo gol a los nueve minutos, pero en esa ocasión Alfonso sí pudo evitarlo con una buena intervención. No fue así cuando se cumplía la media hora de juego. De nuevo Jona le ganaba la partida al guardameta local para poner el 0-2.
El Sevilla Atlético parecía totalmente desahuciado, hasta que a balón parado, en un saque de esquina, Juanmi García logró acortar distancias en el marcador con un gol de cabeza que volvió a evidenciar que las jugadas a balón parado siguen siendo la asignatura pendiente del Alcoyano. Corría el minuto 37 y, con tiempo suficiente para buscar la igualada antes del descanso, los locales cambiaron la imagen y ganaron en confianza, lo que les permitió buscar la portería de José Juan con toda la insistencia de la que habían carecido hasta este momento.
El inicio de la segunda parte mantuvo esa tónica, con un Alcoyano inferior a su rival, pese a protagoniza las ocasiones más claras, como ocurrió en el minuto 58 cuando Carlos Blanco envió de cabeza el balón rozando el poste.
El Sevilla volvió a ser el dueño del balón, al que renunció claramente el conjunto de Alcoy, pero la seguridad defensiva del equipo de Vicente Parras hacía que los andaluces cayeran en la desesperación conforme transcurrían los minutos, ya que sus esfuerzos no se veían recompensados. Además, los locales se mostraban muy blandos y previsibles en sus acciones, lo que permitió que el Alcoyano pudiera hacer el juego que más le convenía en cada momento.
Un penalti no señalado
El árbitro cometió un error que privó al equipo de Alcoy de la posibilidad de aumentar su ventaja en el minuto 80. Se produjo un claro penalti a favor del Alcoyano muy cerca de la línea del área, pero el colegiado lo sacó fuera, y el lanzamiento de Carlos Blanco terminó sin consecuencias tras estrellarse el balón en la barrera.
En los últimos minutos de nuevo se fue arriba el equipo de Parras para asestar la puntilla definitiva que llegó en el minuto 84 con un tanto de Ángel Sánchez que dejaba el partido sentenciado. En plena euforia alcoyana y debacle sevillista, todavía hubo tiempo para un par de ocasiones más muy claras para los visitantes que no fueron aprovechadas. El árbitro añadió seis minutos de tiempo que se jugaron sin consecuencias, y el conjunto alicantino acabó sumando los tres puntos de forma merecida.
El Alcoyano se coloca en los puestos altos de la tabla con ocho puntos, a solo dos de la cabeza. El viernes (19 horas) volverá a jugar como visitante en el campo del Gimnàstic de Tarragona.
