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Néstor Abad compite hoy en la final del Mundial y se saca la espina de Tokio

El gimnasta alcoyano se mete en la ronda definitiva del concurso completo por tercera vez en su carrera y deja en el olvido su «pinchazo» en los Juegos

Néstor Abad

Néstor Abad es incombustible. El gimnasta de Alcoy competirá hoy en la final del campeonato del mundo por tercera vez en su carrera. Ya lo consiguió en Doha 2018, donde accedió a la final como 12º y acabó undécimo, y también, en Stuttgart 2019, donde llegó a la final como 19º y terminó 22º. De esta forma, se quita la espina de los Juegos Olímpicos de Tokio donde no consiguió meterse entre los 24 mejores. En esta ocasión, Néstor sí tuvo una actuación destacada y cumplió el objetivo que se había marcado en el evento que se disputa en Japón. En total, han sido 53 los gimnastas que han afrontado los seis aparatos (la rotación completa) en las jornadas clasificatorias. Abad ha ocupado la 18ª plaza y, por tanto, ha accedido a la gran final individual. Entre los 24 finalistas hay seis gimnastas que ya estuvieron en la final del «all around» de los Juegos Olímpicos de Tokio. Son el japonés Daiki Hashimoto, los turcos Ahmet Onder y Adem Asil, el ucraniano Ilia Kovtun, el kazajo Milad Karimi y el brasileño Caio Souza.

Al margen de la presencia entre los 24 elegidos, la mejor noticia para Néstor Abad es que tiene margen de mejora con respecto a las prestaciones ofrecidas ayer. El gimnasta de Alcoy estuvo muy correcto en suelo y anillas, pero se mostró más discreto en los otros cuatro ejercicios: salto, caballo con arcos, paralelas y barra fija. Es decir, está capacitado para superar hoy la 18ª plaza con la que ha llegado a la final y quedar por delante de Joel Plata, que también se ha metido entre los 24 primeros tras ser noveno en la fase clasificatoria. «No estuve a la altura que requieren unos Juegos Olímpicos. No me gusta poner excusas. Tampoco, esgrimir atenuantes, pero sí es cierto que en Tokio acusé, por una parte, la falta de competiciones durante el último año y medio. La ausencia de eventos por culpa de la pandemia me pasó factura. Además, no llegué nada bien en lo psicológico. Lo de estar tanto tiempo sin ver a mi familia me perjudicó. Los Juegos requieren una mente limpia. No fue mi caso. Llegué saturado. Aunque lo intenté con toda mi alma y mis fuerzas allí mismo, no pude», recuerda Néstor Abad en una entrevista con el Proyecto FER.

El deportista de Alcoy confesó que, tras los Juegos, «tanto en Tokio, como al volver a España, atravesé una crisis anímica bastante fuerte. Fueron semanas complicadas», señala. Preguntado sobre si esta experiencia ha sido, incluso, peor que cuando sufrió las dos gravísimas lesiones de rodilla en los años 2011 y 2014, Néstor explica que son tesituras distintas, «pero, aunque pueda sorprender, no fue más duro el doble percance físico que este bache psicológico. Afortunadamente, me levanté con bastante rapidez. A las pocas semanas, ya había cerrado el libro olímpico y ya estaba pensando en nuevos retos; sobre todo, en el Campeonato del Mundo», explica el gimnasta alcoyano.

Néstor Abad todavía tiene cuerda para rato. Camino de los 29 años, los alcanzará en marzo, el gimnasta de Alcoy ha decidido prolongar su carrera deportiva un tiempo más. «Hasta los Juegos de París 2024. Ese es el destino final. Por desgracia, ni Río ni Tokio se me dieron bien. En Río, pagué la inexperiencia y una cierta inmadurez. En Tokio, fui víctima de un conjunto de circunstancias. Por ello, quiero darme una tercera y última oportunidad. Considero que tengo condiciones para afrontar con garantías».

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