El Joventut d'Elx no encuentra el camino hacia su primer punto en la máxima categoría. El conjunto franjiverde sumó una nueva derrota (5-3), esta vez en la pista de Marín Futsal, otro recién ascendido y, por lo tanto, rival directo en la pelea por la permanencia, que cada vez se antoja más complicada para las ilicitanas.

Como suele ser habitual, el Joventut compitió. No les falta ni valor ni ganas, pero la muralla ya no solo de la primera victoria sino del primer punto sigue siendo infranqueable para las jugadoras dirigidas por Andrea Lacrampe. El inicio, como suele ser habitual, fue destacado, con dos goles de Paula Morote y Romina que hacían aumentar las esperanzas de que podía ser el día del primer triunfo.

Sin embargo, antes del descanso las gallegas ya habían igualado la contienda, por mediación de Ceci Puga y Jessi Lores. Tocaba empezar nuevamente de cero y dejar atrás el recuerdo de la renta de dos dianas. A ello ayudaría el 2-3, obra de Nekane en el primer minuto de la segunda parte.

Pero la ventaja volvió a durar un suspiro. Casi al instante, Jessi Llores, para su doblete personal, firmaba el 3-3. En el minuto 28, Ceci Puga también repetía diana, para poner por primera vez a su equipo por delante. A diferencia del Joventut, el Marín no dejó escapar su renta. Al contrario, la amplió en el minuto 31, con tanto de María León. En los instantes finales, un clásico de las ilicitanas. Todo en busca de la remontada, que no llegó. Séptima derrota en siete jornadas. El fútbol sala volvió a golpear con dureza al Joventut d'Elx.