Casi un mes después de lo anunciado, HLA y Granada se reencuentran (si no ocurre nada) en Alicante. Ambos clubes disputan esta tarde (19.30 horas, Pedro Ferrándiz) el encuentro correspondiente a la jornada 12, que fue aplazado el 17 de diciembre por la detección de un brote covid en el vestuario lucentino. Después, el galopar libre de la variante ómicron ha reprogramado el choque en múltiples ocasiones. El conjunto alicantino, que no compite desde el pasado 28 de diciembre, cuando perdió en su pista frente a Guipuzkoa Basket (87-91), retoma el pulso a la Liga casi con tantas dudas tácticas y emocionales como días de descanso forzoso.
El HLA recibe al líder de una LEB Oro sin respuesta eficaz contra las previsibles consecuencias de una pandemia. Lo hace lastrado por el peso de las derrotas, 7 en doce partidos, y sin una seña de identidad clara. La intermitencia de las jornadas tampoco favorece la cohesión de un bloque al que le falta determinación, dentro y fuera de la cancha, para cerrar los partidos que es capaz de dominar con solvencia durante muchos minutos.
Enfrente, Covirán firma un balance de 10 triunfos y 3 tropiezos. Finalista del «play-off» de ascenso la pasada campaña, vuelve a ser favorito a regresar a la ACB con una de las plantillas más potentes de la Liga. Juan Pablo Pin, que hoy no puede disponer de su base titular, Christian Díaz, lesionado, tiene una estructura muy sólida con Lluis Costa (14,4 de valoración), Pere Tomàs (15) y Thomas Bropleh, uno de los referentes anotadores del campeonato con 15 tantos por contienda. Granada también lleva desde el 28 de diciembre sin jugar, así que, en ese aspecto, ambas franquicias parten sin desventaja... aparente.
