Por fin se observan brotes verdes en la Media Maratón de Alicante, una prueba que ha conseguido revitalizarse después de muchos años caminando en la oscuridad y envuelta en una polémica continua. Aunque todavía quedan muchas cosas por mejorar en una carrera que echa en falta algo más de ambiente durante el recorrido, se ha mejorado sustancialmente. De la mano de Montemar y del Ayuntamiento, junto al patrocinio de Aguas de Alicante, la prueba tiene visos de consolidarse y tener ya una fecha para su celebración más o menos fija sin los vaivenes de ediciones anteriores.
Los atletas keniatas Erick Kiptoo y Valentine Jebet, en categoría masculina y femenina, respectivamente, fueron los ganadores de la Media Maratón. La prueba, que también incluía una carrera de 10 kilómetros, se disputó sobre un circuito único homologado que ha recorrido los lugares más emblemáticos de la ciudad. Kiptoo ha establecido una marca de 1h:04:44 y ha estado escoltado en el podio por su compatriota Peter Brandom Somba, que llegó a un solo un segundo del vencedor, y de Francisco García, que marcó un tiempo de 1h:08:04.
En mujeres, Jebet cruzó la meta con una marca de 1h:17:30, seguida de Pilar Rubio (1h:21:07) y la marroquí Wafiya Benali (1h:21:11).
El covid permitió la disputa de una prueba dominada por los atletas africanos y que muchos de los participantes calificaron de dura por las numerosas cuestas. Tuvo su salida y meta por primera vez desde el Muelle de Levante, junto al Museo Ocean Race, zona que pasó a denominarse para el esta edición «desembarco del corredor». Los atletas disfrutaron de un recorrido de una única vuelta, de sus correspondientes avituallamientos y del compañerismo y la deportividad que suele envolver estas carreras populares. El buen ambiente entre los corredores siempre es lo más destacado al margen de los atletas que consiguen subir al podio. Es para muchos el día marcado en rojo en el calendario para cumplir sus metas después de meses de entrenamiento. Para otros una prueba sin más y para la mayoría la ocasión de disfrutar de un día de deporte en una carrera oficial, cronometrada y con todas las medidas de seguridad.
La vigésimo sexta edición del Medio Maratón de Alicante fue un éxito y reunió a más 2.500 corredores en una prueba que salió tal y como lo había planeado la organización. Había muchas ganas por retomar la competición después de dos años sin poderse hacer por la pandemia. Hubo, por tanto, mucho tiempo para prepararla y siempre se hizo poniéndose en la mente del atleta popular.
La expectación por la prueba superó las expectativas, ya que la solicitud de inscripciones fue más numerosa de lo esperado y muchos atletas apuraron hasta el último día para conseguir su inscripción.
La prueba, en la que tomaron parte 350 clubes, contó además, con un amplio porcentaje de atletas de fuera de la provincia de Alicante, un 40%, de los que un 12% fueron extranjeros, entre ellos un grupo de 30 corredores de Irlanda. Montemar recibió el premio al club con mayor participación.
Albentosa, organizador del evento, valoró la alta participación femenina (un 25%) en una categoría en la que también hubo un gran nivel deportivo con la presencia de atletas africanas y de la uruguaya Clarisse Bermúdez, que acabó cuarta.
El Medio Maratón y la carrera 10k Aguas de Alicante arrancó con puntualidad a partir de las 9:30 horas desde el Muelle de Levante del puerto de la ciudad con más de 2.500 corredores dispuestos a recorrer un circuito homologado por la Federación Española de Atletismo.
La carrera pretende unir turismo y deporte. Tras carrera, se procedió a la entrega de trofeos en la que estuvo José Luis Berenguer, concejal de Deportes, José Pedro García, presidente de Montemar, club organizador, así como representantes de Aguas de Alicante, patrocinador de la prueba.
