El Eón Horneo Alicante mantiene vivas sus esperanzas de ascender a la Asobal tras derrotar al Burgos por 35-34 en un intenso encuentro disputado en el pabellón de los Maristas por las obras del Pitiu Rochel. El conjunto de Luis Parro tuvo al guardameta Kiko Padilla como el mejor de su equipo con una enorme actuación ante un rival que llegó con opciones al último minuto del partido.
El conjunto de Luis Parro sumó dos puntos obligados para seguir en la lucha, ya que ganaron todos los equipos de la parte alta a falta de cuatro jornadas para el final. Los alicantinos dominaron durante la mayor parte del encuentro aunque el Burgos nunca se rindió y llegó a remontar hasta cuatro goles de diferencia. El apoyo del público fue clave para llevar en volandas al equipo que tuvo en David Jiménez a un jugador clave en los momentos más determinantes del partido.
La intensidad y la velocidad fue máxima durante los 60 minutos entre dos equipos que no querían quedar descolgados de la lucha por el ascenso a la máxima categoría. No estuvo exento de polémica el encuentro en los instantes finales con un balón que reclamaba el Burgos pero que al final los árbitros dieron la posesión al Eón tras un fallo en el cronómetro en los últimos segundos. El conjunto alicantino estuvo por delante durante la mayor parte del partido y celebró la victoria por todo lo alto junto a los aficionados.
