Con el drama en la nuca, La Nucía se revolvió y dio el paso definitivo hacia el ascenso. Como un buen boxeador, los de César Ferrando estaban en la lona tras ver como el Arenas empataba en el minuto 82 un partido que tenían totalmente dominado. Tocaba prórroga. Tocaba drama. Con el cansancio que ello conllevaba, tanto físico como mental.
Fer Pina y Javi Martín no quisieron esperar a la prórroga. El primero asistió al segundo y este, con las piernas frescas y a la heroica, superó a su par por potencia y al meta rival con un remate que será recordado en La Nucía como otro gol histórico, en el descuento, para ascender a Primera RFEF.
Y eso que la tarde no empezó nada bien para el conjunto nuciero, ya que a los dos minutos Izeta (19 goles esta temporada) tuvo una ocasión clarísima para adelantar a los suyos. El atacante del conjunto guechotarra realizó una gran maniobra en la frontal del área para deshacerse de su marcador, pero su posterior remate no encontró dirección entre los tres palos.
El susto del Arenas provocó que los vascos continuaran su dominio y atenazó a La Nucía, que tardó en soltarse. Eso sí, cuando lo hizo no perdonó. En la primera acción que los de Ferrando se estiraron, Cabezas ganó un balón largo, se fue escorando hacia la derecha y dibujó un derechazo cruzado impecable para llevar la locura, primero, y la tranquilidad, a continuación, al Camilo Cano.
El tanto rojillo narcotizó a los vascos, que no supieron reencontrarse durante el resto de la primera mitad. La Nucía, por su parte, se limitó a defender su área y a buscar la sentencia al contragolpe, con viento a favor. Protestó mucho un fuera de juego a Cabezas cuando se quedaba solo y Mariano Sanz no llegó por poco a un balón dividido ante el meta Landeta. El Arenas solo generó runrún en una falta lateral peligrosa que desperdició Estrada al buscar el lanzamiento directo.
De la calma a la épica
Al volver del descanso, Fofo tuvo en sus botas la tranquilidad del 2-0 y olvidar cualquier sufrimiento posterior (que acabó llegando). Tras un centro de Cabezas desde la derecha le quedó un balón muerto para remachar a placer, pero cuando ya se preparaba para festejar el tanto se topó con Garro, que desde el suelo desvió a córner.
Hasta el tramo final, los nucieros dominaron con una gran defensa cualquier acometida vasca. Nuevamente Izeta tuvo la más clara en una acción en la que abusó de la conducción. Hasta que llegó el empate y toda lógica se transformó en épica. Un trallazo lejano de Arzuaga sorprendió a Valens, que evitó que entrara por la escuadra, pero dejó el balón muerto para que Cortezón igualara la contienda.
El partido se tuvo que detener, para atender a Moisés y para arreglar la red de la portería de Valens, que no soportó el peso de los futbolistas que se lanzaron a su interior, unos a marcar y otros a salvar. Seis minutos después, el juego se reinició y La Nucía apenas necesitó unos segundos para construir el gol del ascenso. Ya no cabían más fallos, los de Ferrando echaron el cerrojo a su área y ascendieron a Primera RFEF.
