Tocará madrugar, y mucho, para poder disfrutar de la participación de Eusebio Cáceres en el Campeonato del Mundo de Atletismo que da comienzo este viernes en la ciudad de Oregón, Estados Unidos, y que se alargará hasta el próximo día 24. Y es que la diferencia horaria entre el país norteamericano y España, de unas ocho horas, hace que sea más complicado ver la competición del atleta de Onil. Su participación comenzará a las 03.00 de la madrugada del viernes al sábado con las series eliminatorias. Si se clasifica para la final competirá en la madrugada del sábado al domingo a la misma hora.

Camino de los 31 años (los alcanzará en septiembre), el deportista de Onil parece atravesar una segunda juventud. Atrás quedan las turbulencias sufridas entre 2014 y 2018. Su fantástica actuación en los Juegos Olímpicos de Tokio, en los que logró unos espectaculares 8,18m y en los que rozó la medalla de bronce, le ha relanzado. Así lo está demostrando durante esta temporada de aire libre. Desde mayo, el atleta alicantino ha disputado cuatro torneos. En los cuatro, ha superado los 8 metros. Su mejor marca, los 8,15m establecidos el pasado 16 de junio, en Castellón.

 Para el atleta FER, el de Eugene representará su quinto Campeonato del Mundo al aire libre. En Corea 2011, no pasó a la final. En Moscú 2013, con un espectacular registro de 8,26m, ocupó a la cuarta plaza, a tan sólo 1 centímetro de la medalla de bronce. En Londres 2017, quedó eliminado en la fase clasificatoria tras cometer tres nulos. Por último, en Doha 2019, el punto de inflexión en su carrera deportiva, fue 7º con 8,01m.

Cáceres cuando se proclamó campeón de España en La Nucía David Revenga

«La regularidad nunca había sido mi fuerte, la verdad. Ahora, estoy siendo muy fiable, lo cual me reconforta e, incluso, me sorprende. Pero no estoy plenamente satisfecho. Superar los 8 metros con asiduidad está muy bien, pero busco algo más. Quiero ese salto por encima de los 8,20m o acercarme a los 8,30m. Y lo quiero porque creo que lo puedo alcanzar», reconoce Cáceres en declaraciones a la web del Proyecto FER.

«No me marco límite. Desde luego, es obvio que quiero convertirme en uno de los 12 finalistas. Una vez en la final, no me pongo techo. La competición y los saltos dirán. Eso sí, espero no volver a ser cuarto, que ya he sido cuarto en cuatro grandes eventos internacionales (risas). Lo que sí puedo decir es que no antepongo el Europeo de Múnich al Mundial de Eugene. Afronto los dos por igual», señaló.

La selección española, formada por 56 atletas (el tercer mayor contingente de la historia, con 34 hombres y 22 mujeres), intentará desde hoy en Eugene (EEUU) sobreponerse a la baja de sus dos estandartes, Orlando Ortega y Ana Peleteiro, para seguir en el medallero de los campeonatos del mundo, al que sólo faltó en la edición de Londres 2017.

El equipo español regresó sin metales en 2017 y estuvo a punto de hacerlo también en Doha 2019, pero la insistente reclamación española terminó dándole la medalla de bronce en 110 m vallas a Orlando Ortega, que había sido obstaculizado en la carrera final por el jamaicano Omar McLeod.

El vallista de origen cubano no ha podido clasificarse para Eugene por culpa de las lesiones y la mejor saltadora de triple española de todos los tiempos, Ana Peleteiro -actual bronce olímpico-, ha apartado provisionalmente el atletismo para ser madre por primera vez. 

Con el equipo descabezado, la situación exigirá un paso al frente de varios atletas que en los últimos tiempos competían a cubierto de las mayores responsabilidades.