Parece imposible tener la cabeza en un partido, que además es decisivo para tu futuro en la Championscuando están bombardeando la ciudad donde vives, donde vive tu familia, tus amigos, tus compañeros... Más aún si tenemos en cuenta que llevan ocho años exiliados fuera de su ciudad, en un estadio prestado y sin la afición pudiendo mostrar su calor al equipo. Pero a veces la fe, la resiliencia de un grupo que se crece en la adversidad, no tiene límites. Y eso llevó al Shakhtar a estar a punto de ganar un partido histórico por las circunstancias en que se produce ante un rival, el vigente campeón. Pero un gol de Rudiger en la última jugada rescató un empate para un Madrid que no dio la talla.

Reconfortó de inicio ver el cariñoso tifo que pobló las gradas con las banderas de Ucrania y Polonia hermanadas. Con la dolorosa tesitura de los bombardeos de Putin a una docena de ciudades ucranianas saltó al campo el Shakhtar Donetsk con sus jóvenes talentos para medirse a un Real Madrid cargado de meritorios en el que Ancelotti dejaba entrever que está más pendiente del partido del domingo ante el Barcelona en el Bernabéu. 

Regresaba Benzema al once para engrasar un ataque que se ha atascado en las últimas jornadas y rodarse de cara al clásico. Con Vinicius y Modric en el banquillo y Courtois en Madrid, Hazard se subía al once pillando su último tren. Pocos tienen fe ya en el belga, pero nadie podrá culpar a Carletto esta temporada de no dar oportunidades a toda la plantilla. Si el curso pasado gobernó la Liga y la Champions con 14 jugadores, este año de Mundial atravesado en mitad de la temporada apuesta por sacar brillo al fondo de armario. 

El Shakhtar mostró en Madrid tanto descaro como indolencia defensiva. Ni una mala patada para cortocircuitar al ataque blanco, donde Benzema disfrutó jugando de quarterback descolgado como enganche. En esta ocasión era Hazard quien bajaba para asociarse entre líneas, dejando arriba a Karim como referencia. En los ucranianos, Jovicevic colocaba a Traoré como boya en un ataque en el que Mudryk llevaba la batuta. El ambiente era cordial, de dominio blanco, pero de ritmo espeso. Pocas ocasiones y un Shakhtar que se iba creciendo ante un Madrid que jugaba con el piloto automático. Pacífico empate al descanso.

Gol en frío

Todo saltó por los aires en la primera jugada de ataque del Shakhtar, en la que Zubkov ganó la espalda a Mendy y clavó su testarazo. Sus dos primeros remates, en el Bernabéu y en Varsovia, acababan en la redes de Lunin. La plácida siesta del Madrid se convertía en pesadilla. El gol escoció tanto que Ancelotti puso toda la carne en el asador con Modric y Vinicius. Se venían 40 minutos de asedio ante un equipo que defendía con el brío de todo un país y con el descaro que les imprime un entrenador valiente como Igor Jovicevic. Llegará a buen puerto o se quedará en el camino, pero la propuesta de este Shakhtar es admirable, más allá de todo lo que le rodea.

Pudo sentenciar Traoré, que terminó una contra disparando al larguero ante el cabreo monumental de Ancelotti, luego fue Zubkov quien hizo trabajar a Lunin en un disparo lejano, y después Mudryk desperdició otra llegada. Lejos de embotellas a los ucranianos, el Madrid tenía una vía de agua en el medio sin Tchouaméni. Y el enfado de Carletto, a días del clásico era morrocotudo. Sus jugadores seguían plomizos, abotargados, lentos. La primera derrota de la temporada estaba más cerca que el empate por las contras ucranianas. Los blancos tuvieron ocasiones, pero no tiraron a puerta en toda la segunda mitad hasta el remate de Rudiger. Poco más que decir.

El gol de Rudiger clasifica al Madrid directamente, aunque no como primero aún. Los blancos siguen sin perder esta temporada y marcando en todos los partidos y se salvan in extremis a días del clásico. El Shakhtar se queda sin una victoria que regalaría una sonrisa a Ucrania en medio de la tragedia que viven.

Ficha técnica

1- SHAKHTAR: Trubin; Mykhaylichenko, Bondar, Matviyenko, Konoplia; Stepanenko; Traoré, Bondarenko, Sudakov, Mudryk; Zubkov. Entrenador: Igor Jovicevic. Cambios: Cambios: Sikan por Traoré (76'), Jurasek por Sudakov (79'), Taylor por Zubkov (79'), Petriak por Mudryk (85')

1- REAL MADRID: Lunin; Lucas Vázquez, Nacho, Rüdiger, Mendy (Alaba; Valverde (Camavinga, Tchouaméni, Kroos; Rodrygo, Benzema, Hazard. Entrenador: Carlo Ancelotti. Cambios: Vinicius por Hazard (56'), Modric por Tchouameni (56'), Alaba por Mendy (67'), Camavinga por Valverde (67'), Asensio por Rodrygo (67')

GOL: 1-0, Zubkov (46'), 1-1, Rudiger (95')

ÁRBITRO: Orel Grinfeld, de Israel. Amonestó a Konoplia, Militao, Bondarenko, Kroos.

ESTADIO Municipal Mariscal Józef Pilsudski, de Varsovia.