El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, cifró ayer la exposición de las cajas de ahorros al sector de la construcción y promoción inmobiliaria en 217.000 millones de euros, de los que el 46% (unos 100.000 millones) son potencialmente problemáticos. Así lo afirmó durante una comparecencia pública para valorar el decreto ley de Reforzamiento del Sistema Financiero aprobado por el Gobierno, en la que calificó de "imprescindible" la nueva normativa que eleva el capital inmediatamente disponible de las entidades, si se quiere atajar la desconfianza de los mercados.

Del total de activos potencialmente problemáticos, 28.000 millones de euros corresponden a préstamos dudosos -que ya han entrado en mora- y otros 28.000 millones a préstamos en situación normal bajo vigilancia, mientras que los inmuebles adjudicados se elevan a 44.000 millones de euros, lo que significa la quinta parte del total.

El gobernador del Banco de España defendió el importante esfuerzo de saneamiento y de trasparencia que han realizado las cajas y negó que exista un déficit en el reconocimiento de las pérdidas que han tenido las entidades por esta causa y que, según recordó, ya están cubiertas al 100% con provisiones. Además, las coberturas específicas constituidas representan un 31% de la exposición potencialmente problemática y si se suman las provisiones genéricas, la cobertura se eleva al 38%, según los datos que maneja el instituto emisor español.

En este sentido, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, indicó que la información ya publicada por las cajas de ahorros respecto a su exposición al ladrillo es muy detallada, y se declaró "orgulloso" de cómo se están valorando los activos inmobiliarios. "No tiene sentido preguntarse eso de: ¿uy, qué tendrán escondido ahí?", argumentó.

Respecto a qué efecto podría tener una devaluación del suelo sobre la situación de las cajas de ahorros, el gobernador dijo que aunque se registrase un descenso del precio del 70%, "las cajas no tendrían problemas", aunque sí los tendrían en caso de que el suelo "se regalase", ironizó.

Desconfianza de los mercados

Fernández Ordóñez insistió en que el decreto ley para reforzar el sistema financiero aprobado por el Gobierno era "imprescindible" para atajar la desconfianza sobre las entidades españolas y garantizar su acceso a la financiación mayorista, y que sin él se registrarían caídas del crédito "muy importantes". En este sentido, valoró el proceso de reestructuración llevado a cabo por las entidades financieras en España y que ha supuesto la reducción del número de cajas de ahorros de 45 a 17, pero consideró que aún "hay que hacer más cosas" y que la crisis de deuda soberana de Irlanda hizo necesaria la adopción de medidas para atajar las dudas sobre la solvencia de la economía española y de su sistema financiero.

En este sentido, el gobernador del Banco de España desechó de plano la tesis de los que consideran que no hacía falta aprobar el decreto ley de solvencia porque el sistema financiero ya contaba con la nueva Ley de Cajas y con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para resolver sus eventuales problemas.

A su parecer, la nueva norma ofrece suficientes elementos para tranquilizar a los mercados porque aquellos que "no quieran mirar las cifras" sobre la situación del sistema financiero español tienen la garantía de que todas las entidades españolas contarán con un mínimo de capital del 8% y del 10% en otros casos. "Es un mensaje capital para revertir la desconfianza", enfatizó.

"Si no hacemos nada hubiéramos tenido una reducción del crédito muy importante, el "credit crunch" estaría asegurado, porque las entidades que no hubieran podido renovar su financiación habrían reducido la concesión de crédito", sostuvo Fernández Ordóñez, que se declaró "totalmente satisfecho" del decreto ley aprobado por el Gobierno.

Sobre la entrada de inversores extranjeros en el capital de las cajas de ahorros, indicó que el Banco de España no les impondrá restricciones pero velará por que no sean especuladores y tengan vocación de permanencia en las entidades. Se permitirá la entrada de inversores "serios, que no van a entrar y mañana salir corriendo", ilustró. En cuanto a las necesidades de capitalización del sistema financiero español, el gobernador recalcó que se conocerán el próximo 10 de marzo pero que, en cualquier caso, estarán "claramente por debajo" de la cifra de 20.000 millones anunciada por el Gobierno.

Bancaja perdió 26,3 millones en el segundo semestre de 2010

Bancaja registró unas pérdidas de 26,3 millones de euros en el segundo semestre del año pasado, según informó ayer la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en una nota en la que comunicaba su balance individual correspondiente al mencionado período. Pese a esas pérdidas, la entidad presidida por José Luis Olivas cerró el ejercicio 2010 con unas ganancias de 102,3 millones. Las números rojos semestrales, según fuentes de la caja, obedecen a las provisiones y a la dotación para el fondo laboral (las prejubilaciones), que se consignaron en diciembre. Caja Madrid, socia de Bancaja, también perdió 29,3 millones en los últimos seis meses, aunque en el conjunto del año ganó 180,4 millones. jordi cuenca valencia