Los inicios de una startup no son un camino fácil. Poner en marcha una idea, conquistar el mercado y conseguir inversión para proseguir su camino, forman parte de una larga andadura que en casi todos los casos necesita grandes dosis de asesoramiento.
En este último concepto, ha contribuido Distrito Digital con la realización del congreso SWG Getaway. Un encuentro que el hub tecnológico puso en marcha a través de la aceleradora Startup Wise Guys fundada en 2012 en Estonia con programas en SaaS, fintech y ciberseguridad que ha sido nombrada recientemente el mejor fondo semilla de CEE.
La cita contó con la participaron de más de 145 personas de 21 nacionalidades distintas quienes a través de distintas presentaciones de la mano de expertos y diversos casos reales, analizaron cuestiones trascendentales para el crecimiento y la supervivencia de una startup.
Diversas conferencias pusieron sobre la mesa conceptos como la inteligencia artificial. Cuestiones de presente pero sobre todo de futuro que son un gran ingrediente para estas empresas que inician la conquista de su mercado económico.
En relación a este concepto, se pudo ver que actualmente un 95% de negocios se benefician de la inteligencia artificial mientras que únicamente el 5% inician un proyecto unicamente basado en este término.
Otras de las cuestiones analizadas y que actualmente son claves para las startups son los avances tecnológicos. El almacenamiento en la nube o la potencia de los ordenadores, a través de los avances en computación cuántica, son dos herramientas que, aunque son muy conocidas, conforman un tándem magnífico para el crecimiento; son sin duda, una oportunidad para que las nuevas ideas de negocio se expandan.
Los robots también estuvieron presentes en estas jornadas de análisis de la mano de Guillermo Falco. En su presentación intentó tranquilizar a quienes piensan que son los sustitutos de las personas pues como bien explicaba, «los robots son muy buenos para llevar a cabo un único proceso mientras que los humanos son multifuncionales; aspecto por el cual nunca podrán igualar las características humanas». Los robots se ofrecen a las startups como una vía de apoyo, ya que pueden ayudarles a reemplazar un proceso concreto y así beneficiar a su desarrollo.
Las claves de la inversión
Las claves de la inversiónTras el análisis de este concepto se pudo ver que la inversión es un factor completamente variable y que depende de cada país y a su vez de cada ciudad.
En este aspecto el director de SPTCV, Antonio Rodes, indicaba que «Distrito Digital ofrece un sistema accesible para que las startups inicien su andadura, costes reducidos y muchas herramientas a su alcance, además de una ubicación estratégica, ya que la Comunitat Valenciana se encuentra perfectamente conectada y esto permite que una vez estén instalados aquí puedan viajar sin problemas a núcleos más grandes». Puntualizaba que «este hub tecnológico permite que las startups puedan iniciar su actividad sin un gran desembolso económico».
Testimonios reales, escuchar para no cometer errores
Testimonios reales, escuchar para no cometer errores
Expansión de la zona de confort
«El creador de una startup nunca debe dejar de conquistar, debe expandir constantemente su zona de confort», así se manifestaba Henri Ploom CEO de Rebel Roam que explicaba que «una vez uno se acostumbra a las lagartijas debe buscar serpientes y así sucesivamente, hay que ir descubriendo, superando los desafíos que se plantean a diario».
No hay que buscar respuestas, hay que buscar preguntas
Jetgenvi Kabanov, CPO Bolt argumentaba que «no hay que buscar respuestas adecuadas, hay que buscar las preguntas adecuadas y para ello es muy importante investigar el mercado, la competencia, todo lo que rodea a la expansión del negocio».
La startup se construye para el cliente no para el inversor
Cristóbal Alonso, CEO de Startup Wise Guys indicaba que «muchos fundadores quieren que su idea sea vendible y se olvidan del cliente. El 50% de las startups son atractivas para el factor inversión pero no representan un negocio real y por esoo se quedan sin dinero antes de que puedan materializarse. Hay veces que el fundador está pendiente de que su idea guste a quienes él considera que tienen que levantarla, los inversores; idea equivocada ya que el cliente es el que verdaderamente impulsa el proyecto».
