Aunque su negocio principal sigue siendo la venta de coches -son los propietarios de los concesionarios de Ford en Elche y Orihuela-, Modesto Crespo y su familia también han sabido sacar partido a sus inversiones en el sector inmobiliario. Un negocio que el expresidente de la CAM y los suyos han articulado, principalmente, a través de las sociedades Promociones El Sauce y Promociones Cotelango, con las que ostentan la titularidad de diversos inmuebles o terrenos, como los que albergan el centro comercial homónimo en Elche, en el que se asientan diversas medianas y grandes superficies. Una fuente constante y regular de ingresos a lo largo de los años.
Así, de acuerdo con las cuentas que acaban de depositar en el Registro, la suma de los beneficios de ambas sociedades alcanzó el año pasado los 332.574 euros, lo que supuso un incremento del 15,7% sobre las cifras del ejercicio anterior. Una cantidad que, eso sí, de momento los Crespo-Quiles han optado por destinar a reservas en los balances de estas compañías.
En concreto, Promociones Cotelango obtuvo un resultado de 55.246 euros, más del doble que el año anterior, tras lograr 53.000 euros de cifra de negocio y otros 269.542 por otros ingresos de explotación y reducir notablemente sus gastos. Por su parte, Promociones El Sauce anotó hasta 1.044.922 euros como ingresos de explotación, lo que se tradujo en un beneficio de 277.328 euros, un 6,2% más. Entre las dos mercantiles suman unos activos de 13,6 millones de euros aunque también acumulan una deuda con las entidades financieras de algo más de 5,1 millones de euros, de acuerdo con las mismas fuentes.
Al frente del concesionario
Lo que ahora falta por saber son las cuentas de la principal firma familiar, Automóviles Crespo SA, que en 2017 facturó 16,2 millones. En este sentido, cabe recordar que desde el pasado mes de enero Modesto Crespo vuelve a ostentar la presidencia de esta mercantil, un cargo que había abandonado a principios del año 2013, cuando se vio inmerso en las distintas investigaciones judiciales que sucedieron a la quiebra de la CAM. El empresario ilicitano resultó absuelto en la causa principal, la que juzgó el falseamiento de las cuentas de la caja, y alcanzó un acuerdo para evitar la cárcel a cambio de declararse culpable por el cobro indebido de 600.000 euros en dietas. Modesto Crespo declinó ayer realizar ningún comentario a este diario.