El gigante noveldense del mármol, el Grupo Levantina, tiene nuevo jefe. El quinto que designa el fondo británico Bybrook desde que se hizo con el control de la compañía en mayo del año pasado. El escogido ha sido el ejecutivo Juan Dionis Trenor, que llegó a ocupar este mismo cargo entre los años 2016 y 2017 en la chocolatera valenciana Natra, y que también ha trabajado en firmas como FCC o Service Point Solutions. Aunque su designación se produjo el pasado día 1, no fue hasta ayer cuando se hizo oficial, al publicarse en el Boletín Oficial del Registro Mercantil.

En este sentido, la propia empresa comunicó el nombramiento a los representantes de los trabajadores hace unos días con una circular en la que se señalaba que Dionis Trenor acumula una experiencia de más de 25 años en puestos ejecutivos en empresas industriales, y que cuenta con todo el «apoyo» de los nuevos accionistas, con los que ya ha trabajado en anteriores ocasiones. Igualmente, desde la dirección de la firma señalaron a los empleados su confianza en que sea el CEO que facilite la adaptación y los cambios que necesita la firma para remontar la delicada situación en que se encuentra.

Un deseo que, sin duda, comparte la plantilla ante el baile de cargos que se ha producido en el último año y medio. Así, tras su desembarco en mayo del año pasado, Bybrook ya sustituyó al entonces consejero delegado Martin Beck por el ejecutivo galo Patrick Verschelde, que se mantuvo en el cargo hasta que la firma logró refinanciar su deuda. Posteriormente, le relevó Don Nicolson, según la información que consta en el Registro Mercantil, al que en marzo de este año sustituyó Andreas Fluhrer, que fue quien acometió la desagradable tarea de negociar el ERE que puso en marcha Levantina en primavera y que supuso la salida de 234 personas.

Fue en mayo cuando la firma anunció la contratación del ejecutivo Alejandro Rodríguez Carmona, en teoría, el responsable de liderar la nueva etapa de la marmolera. Duró apenas dos meses, ya que en junio presentó su dimisión, según la versión oficial de la compañía, y Fluhrer volvió a ocupar el cargo, hasta que ahora se ha designado a Juan Dionis Trenor.

Pérdidas

El grupo Levantina cerró el pasado ejercicio con un descenso del 16,5% en su cifra de negocios, al pasar de 186,6 a 155,7 millones de euros. Aunque no logró salir de los números rojos, sí redujo notablemente sus pérdidas, desde los 117 millones que llegó a registrar en 2017 hasta 24,8 millones. La compañía se vio obligada a acometer a finales del año pasado una reducción de capital por importe de casi 100 millones de euros para reestablecer su equilibrio patrimonial. Además, la firma tuvo que negociar una renovación de su deuda con sus acreedores, entre los que se encuentran una filial del banco JP Morgan y varias sociedades con sede en Luxemburgo, entre otros.