Tras casi dos años para reorganizar y clarificar la estructura de la compañía, Marjal acaba de presentar las que suponen sus primeras cuentas consolidadas, que permiten atisbar las dimensiones del que ya es uno de los grandes grupos familiares de la provincia. Según estos balances, el conglomerado que encabezan Javier Fur y Francisco Gómez cerró el pasado año con una facturación 31,4 millones y unos beneficios de 3,2 millones, unas cifras que se disparan notablemente si lo que se tiene en cuenta es el volumen de negocio total de las compañías situadas en la órbita del grupo y no únicamente la parte proporcional que le corresponde contabilizar en función de su porcentaje accionarial.

Así, según la información divulgada por la compañía, las promotoras Somium Premium Properties y Apartamentos UMA; la gestora de resorts Servicios Turísticos Marjal; la piscifactoría Culmar; y el holding que ejerce de cabecera de todo el entramado -la sociedad Grupo Empresarial Fur y Gómez- movieron el pasado ejercicio 55,2 millones de euros y lograron unos resultados agregados (la suma de los beneficios individuales de las distintas sociedades) de 10,68 millones de euros frente a los 3,96 millones del ejercicio anterior.

Un aumento de ganancias en el que tuvo mucho que ver la operación por la que Marjal vendió el 50% de su división turística a un grupo de inversores encabezada por la sociedad de capital riesgo Corpfin. Los nuevos accionistas desembolsaron 10,3 millones de euros, de los que 6,8 se contabilizaron como ganancias, lo que disparó el beneficio individual de la sociedad Grupo Empresarial Fur y Gómez hasta los 7,6 millones. Eso sí, un beneficio que en las cuentas consolidadas no aparece como tal, ya que este caso se contabiliza como incremento patrimonial.

Por su parte, la propia división turística elevó su facturación desde los 10,6 hasta los 17,26 millones, tras sumar el cámping de El Prats, en Tarragona, a las instalaciones que el grupo tiene en Crevillente y Guardamar. Una adquisición por la que esta firma desembolsó 19,3 millones: 14,5 millones en efectivo y otros cinco millones en pago aplazado, según los balances de la mercantil. Servicios Turísticos Marjal ganó 1,37 millones.

Menos viviendas entregadas

Por su parte, el negocio inmobiliario registró unas ventas de 28,52 millones de euros, lo que supuso un importante descenso respecto a los 44,14 millones que logró en 2017, debido a las menores entregas de viviendas que se produjeron. No obstante, desde la firma restan importancia a esta caída, que atribuyen al ciclo constructor, y señalan que el volumen aumentará en los próximos ejercicios a medida que finalicen las obras que ahora tiene en curso. En este caso, hasta 19,52 millones correspondieron a la facturación de Somium -100% de Marjal-, que ganó algo más de 213.000 euros, mientras que el resto procedió de Apartamentos UMA, la sociedad conjunta que la firma tiene con el grupo GMP, propietario del Las Colinas Golf -donde realizan la mayoría de sus promociones-, que generó 1,6 millones de ganancias.

Por último, la piscifactoría Culmar, donde Marjal tiene un 41%, sumó unas ventas de 7,4 millones, pero no logró evitar unas pérdidas de 91.261 euros.

Una cartera de obra de 130 millones de euros

A pesar de su apuesta por la diversificación, el sector inmobiliario todavía representa más de la mitad del negocio que genera todo el entramado empresarial que se mueve alrededor de Marjal. Especializado en viviendas de lujo para extranjeros, en la actualidad la mayor parte de sus promociones están en el entorno de Las Colinas Golf. La compañía valora en 130 millones de euros la cartera de obras que tiene en ejecución o pendiente de ejecutar.