Ecisa Chile demandará al Ministerio de Obras Públicas de este país por los sobrecostes en el proyecto de ampliación del Centro Cultural Gabriela Mistral, que llevaron a la participada de la constructora alicantina a la quiebra, y le exigirá una indemnización de 10.000 millones de pesos chilenos, es decir, unos 11, 7 millones de euros. Así lo confirmaron ayer desde la compañía propiedad del fondo Al Alfia y la familia Peláez, después de que el diario local La Tercera adelantara la noticia.

Eso sí, desde la constructora recordaron que Ecisa Chile se rige por las leyes del país sudamericano y que se encuentra en proceso de liquidación, por lo que es la liquidadora concursal quien toma estas decisiones. En este sentido, el objetivo de la demanda es reunir la mayor cantidad de dinero posible para hacer frente a las deudas que acumula esta participada, según la citada publicación.

Fue en el año 2015 cuando Ecisa Chile -que llegó a ser una de las participadas de mayor facturación del grupo alicantino- se adjudicó las obras para la ampliación del Centro Cultural Gabriela Mistral, que iba a contar con un gran auditorio para 1.800 personas. Sin embargo, a medida que las obras avanzaban, se fueron acumulando los sobrecostes sobre el presupuesto original y la compañía reclamó al Gobierno chileno que se hiciera cargo de la desviación, ya que consideró que los cálculos iniciales se habían realizado mal. Sin embargo, el Ejecutivo chileno rechazó aumentar el presupuesto y la constructora alicantina optó por abandonar el proyecto y realizar una liquidación ordenada de esta mercantil.

La decisión supuso para la compañía alicantina unas pérdidas considerables y fueron una de las causas de que en 2018 acabara el ejercicio con unos números rojos de 25,6 millones en sus cuentas consolidadas.