El grupo turístico alemán TUI ha comenzado a vender paquetes de vacaciones para el próximo mes de julio en la Costa Blanca con precios -en base una habitación doble de hotel con alojamiento y desayuno- que van desde los 600 euros en un hotel de tres estrellas a los 3.000 de uno de lujo de cinco estrellas. En concreto, ayer tenía en su página web ofertas de alojamiento en 110 hoteles y complejos de apartamentos de la Costa Blanca, la mayoría en Benidorm. TUI y el resto de turoperadores confían en poder volver a volar desde Europa al aeropuerto desde julio, cuando está previsto que España entre en la «nueva normalidad». Con todo, los hoteleros estiman que será complicado que este verano puedan venir muchos turistas extranjeros, sobre todo los británicos por las restricciones a los viajes en el Reino Unido, muy castigado por el covid-19. El turismo británico representa el 40% del total del turismo en zonas como Benidorm durante el verano.
TUI es el cuarto turoperador en la Costa Blanca, en la que ha ido perdiendo protagonismo en los últimos años por la aparición de otros turoperadores como Jet2.holidays y las compañías de bajo coste.
El gigante turístico alemán tiene previsto eliminar 8.000 puestos de trabajo a escala mundial, ya que prevé recortes en inversión, gasto, tamaño y presencia en todo el mundo con motivo de la pandemia del coronavirus. TUI tiene previsto operar también este verano tras las buenas noticias recibidas de Bruselas pero sigue inmerso en la polémica debido a que no ha pagado aún las deudas pendientes con los hoteleros de Benidorm y, además, ha fijado un calendario de pagos que estirará sus deudas hasta final de año. Y todo pese a haber recibido una buena inyección económica del Gobierno de Alemania, que le ha permitido sanear sus cuentas.
En un comunicado publicado en su página web el operador asegura que está listo para retomar la actividad en Alemania y en Europa según se vayan levantado algunas restricciones impuestas como consecuencia de la pandemia, «siempre de forma responsable y con las reglas claras». Actualmente se está implementando un catálogo de diez puntos para aumentar las medidas de higiene y protección en los hoteles del Grupo en todo el mundo, ofreciendo a los huéspedes la mayor seguridad posible.
El mes pasado, el Gobierno alemán autorizó que el grupo turístico recibiera un crédito puente por valor de 1.800 millones de euros para hacer frente a la paralización de la actividad económica ocasionada por el virus. Así, esta semana el grupo cuenta con recursos financieros y líneas de crédito disponibles de alrededor de 2.100 millones de euros. «Los créditos recibidos deben ser devueltos en un breve periodo de tiempo y el elevado endeudamiento debe ser reducido rápidamente», señaló la compañía alemana en un comunicado."TUI debería salir de la crisis más fuerte. Pero será un TUI diferente y encontrará un entorno de mercado diferente que antes de la pandemia. Esto requerirá recortes: en inversiones, en costes, en nuestro tamaño y nuestra presencia en todo el mundo. Debemos ser más delgados que antes, más eficientes, más rápidos y más digitales", asegura el consejero delegado de TUI, Fritz Joussen.
El objetivo de la compañía es reducir permanentemente su base de costes generales en un 30% en todo el Grupo.
El 15 de marzo, la Junta Ejecutiva retiró la previsión económica del grupo para el conjunto al año. Debido a la pandemia en curso y a las continuas restricciones de viaje en todo el mundo la junta directiva se abstiene de proporcionar nuevas previsiones. Actualmente el 35% del programa de verano todavía está reservado.
