De albergar rodajes cinematográficos a formar especialistas en las tecnologías más avanzadas. Los representantes de la Generalitat y de la Fundación Telefónica han firmado este miércoles el convenio que permtirá transformar los antiguos estudios 1 y 2 de Ciudad de la Luz -que hoy alberga el Distrito Digital-, en una nueva sede del campus de programación informática 42, una iniciativa pedagógica que ha revolucionado la formación en nuevas tecnologías desde su aparición en París, y que en España ha importado la fundación de la compañía de telecomunicaciones.
La metodología que emplea esta escuela -sin horarios, sin profesores al uso y en el que los alumnos aprenden mediante la colaboración en la resolución de retos- permite que cualquier persona pueda formarse en esta materia, aunque no tenga ningún tipo de conocimientos previos. Un sistema que permite reforzar las habilidades de los estudiantes de carreras tecnológicas, pero también reciclar a trabajadores sin formación de otros sectores o dar una nueva oportunidad a jóvenes que han abandonado el sistema escolar reglado.
Y todo con un grado de inserción laboral del 100%, según ha explicado la directora general de la Fundación Telefónica, Carmen Morenés, que este miércoles ha firmado el protocolo de intenciones que facilitará esta iniciativa con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig; la consellera de Innovación, Carolina Pascual; y el director general de la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana (SPTCV), Antonio Rodes, en un acto en las instalaciones del Distrito Digital.
De momento, en España tan sólo está operativo el campus de Madrid, pero ya están previstas nuevas sedes en Málaga y Vizcaya, además de la que abrirá sus puertas en las antiguas instalaciones de Ciudad de la Luz, que se denominará 42Alicante y que estará operativa en 2021, tras los trabajos de acondicionamiento de los antiguos platós cinematográficos.
24.000 candidatos
Para dar una idea del éxito de este sistema, Carmen Morenés ha señalado que en estos momentos hay 24.000 candidatos inscritos a la espera de que se abra alguna "piscina" -como denominan a los procesos de selección- en alguna de las escuelas en España. La formación es totalmente gratuita y, aunque lo habitual es que se tarden unos tres años y medio en superar los 21 niveles de que consta, cada alumno marca su ritmo -por ejemplo, se puede compatibilizar con un empleo o una carrera universitaria- y muchos abandonan el programa antes de finalizarlo, al recibir alguna oferta de trabajo.
Las instalaciones están abiertas las 24 horas del día, los siete días de la semana, y las previsión es que puedan estudiar de forma conjunta -aunque por turnos- un mínimo de 600 alumnos. En este sentido, uno de los retos de 42 aún debe afrontar, según ha expuesto Morenés, es el bajo porcentajes de mujeres entre sus alumnas, que sólo suponen un 12% en el caso de Madrid.
Durante la presentación, la consellera de Innovación, Carolina Pascual, ha recordado que, en la actualidad, apenas un 5,5% de la población tiene conocimientos de programación cuando los estudios realizados apuntan a que estos serán cada vez más necesarios en todo tipo de empleos. "El riesgo de ahondar en la fractura social es importante", ha señalado, por lo que ha considerado que este tipo de iniciativas resultan especialmente relevantes. Sobre todo porque, además de los conocimientos puros y duros de programación, escuela 42 también enseña otras habilidades, como la resolución de problemas, el reciclaje continuo, o el trabajo colaborativo.
Por su lado, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha recordado que el gran problema de la economía valenciana es la diferencia de productividad de más de siete puntos que mantiene con el resto del país, y de más de 10 puntos con la media europea. Un problema que, según ha recordado, el Ejecutivo autonómico quiere resolver con su apuesta por la economía digital, en la que se encuadra el proyecto de Distrito Digital y, ahora, esta nueva escuela.
