Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El antiguo holding inmobiliario de la CAM contiene sus pérdidas y encara su recta final

Tenedora de Inversiones y Participaciones (TIP) cierra 2019 con unos números rojos de solo 7,1 millones frente a los 124 del año anterior

Uno de los hoteles del grupo Valfensal en el Caribe mexicano, que estaba participado por TIP. información

Después de más de ochos años de trabajo, los responsables del Sabadell empiezan a ver la luz al final del túnel en la ardua tarea que están desarrollando para liquidar el entramado societario vinculado al ladrillo que heredaron de la CAM y, en particular, el holding que la desaparecida caja alicantina creó para canalizar sus principales inversiones en empresas inmobiliarias, Tenedora de Inversiones y Participaciones (TIP). Un conglomerado que ha sido una auténtica máquina de perder dinero desde la intervención de la extinta entidad, aunque parece que, por fin, se ha logrado contener la brecha.

De esta forma, TIP cerró el pasado ejercicio con unos números rojos de solo 7,1 millones de euros, de acuerdo con las cuentas que se acaban de depositar en el Registro Mercantil, sin duda una mejora más que notable en comparación con los más de 124 millones que perdió en 2018 o los 848 millones que llegó a anotar en 2012. En total, desde que el Banco de España intervino la CAM y adjudicó su negocio financiero al Sabadell, esta filial ya acumula casi 2.115 millones de pérdidas.

En cualquier caso, todo apunta a que la liquidación de este holding encara ya su recta final, toda vez que en diciembre del año pasado el Sabadell traspasó la práctica totalidad de los terrenos y construcciones que acumulaba, dentro de las dos carteras que colocó, junto con otros activos inmobiliarios deteriorados, al fondo norteamericano Cerberus.

Así, la citada operación ha supuesto la salida del balance de TIP de solares y edificios por los que en su día las distintas sociedades que forman parte del holding llegaron a pagar 835 millones de euros, aunque la compañía los tenía valorados en estos momentos en poco más de 94 millones de euros, tras los deterioros acumulados desde el estallido de la burbuja inmobiliaria. Todo un ejemplo de la ruina de la mayoría de los negocios en que se metieron los antiguos gestores de la CAM en el negocio del ladrillo.

Más allá de esto, el balance de TIP refleja que el Sabadell ya ha liquidado o vendido hasta 60 de las 69 sociedades y participaciones en empresas que llegaron a formar parte del holding. La última de ellas ha sido el paquete del 40% que ostentaba en Gesta Aparcamientos, una compañía en que la CAM entró a través de dos de sus filiales -la propia TIP y Fonomed-, y en la que se alió con un grupo promotor ilicitano para costruir diversos aparcamientos en Sedaví, Sagunto y Hellín.

Entre las que aún tiene pendientes de liquidar destaca Inversiones en Resorts Mediterráneos, la firma que crearon varias entidades con los activos que se vieron obligadas a asumir cuando quebró Polaris World, uno de los emblemas de los años de la burbuja. También sigue Caminsa Urbanismo, que la CAM constituyó junto a otro símbolo de los años del «boom» inmobiliario, la valenciana Quabit.

Del Caribe al rescate de Kelme

Tenedora de Inversiones y Participaciones fue el instrumento que crearon en su día el entonces director general de la CAM Roberto López y el responsable del negocio inmobiliario de la entidad Daniel Gil para agilizar las inversiones de la entidad en el ladrillo, unas inversiones que luego fueron muy cuestionadas. De hecho, los dos ejecutivos se encuentran pendientes de juicio por algunas de ellas, como la participación que realizaron en el grupo Valfensal, con el que crearon un grupo hotelero en el Caribe, junto a los empresarios benidormís Juan Ferri y José Baldó. También canalizaron a través de TIP las inversiones que realizaron en México junto a Hansa Urbana, tanto en Cancún, como en Baja California. Las relaciones que mantuvieron la CAM con la promotora de la familia Galea también están pendientes de otro juicio. Igualmente, este holding ostentaba la propiedad de Desarrollos Urbanísticos Aguamarga, la sociedad que crearon en 2008 la CAM, Bancaja y el Instituto Valenciano de Finanzas para rescatar a Kelme, cuando en 2008 atravesaba por dificultades.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats