El número de empresas y particulares de la provincia que se declararon en concurso de acreedores durante el segundo trimestre del año se redujo a menos de la mitad durante el segundo trimestre del año, una cifra que se vio influenciada por la paralización de la actividad en los juzgados y también por las medidas adoptadas por el Gobierno, que frenaron los concursos necesarios, es decir, aquellos que inician los acreedores.

De esta forma, en total entre abril y junio se declararon 33 concursos frente a los 68 del mismo periodo de 2019, lo que supone un 52% menos. De esta forma se prolonga la caída que ya se registró en el primer trimestre, cuando estos procedimientos disminuyeron un 11,7% por el inicio de las primeras medidas de confinamiento.

Del total de concursos presentados, tres fueron de particulares y el resto de empresas. La inmensa mayoría fueron procesos voluntarios, es decir, solicitados por los propios deudores, en parte por las medidas adoptadas por el Ejecutivo para evitar la quiebra masiva de empresas, que han frenado las posibles demandas de los acreedores.

Por sectores, durante el pasado trimestre fue el comercio mayorista la actividad que concentró un mayor número de concursos, con un total de seis; seguido por la industria, con cinco procedimientos; y la construcción, con cuatro.

El INE advierte de que los datos también se ven influidos por el menor volumen de respuestas que ha recibido de los juzgados para realizar la estadística, debido a los efectos de la pandemia.