La fotografía de la cúpula de la nueva CaixaBank todavía debe perfilarse en los próximos días. Pero todo apunta a que en la imagen, al menos en la parte más alta de la entidad, puede que no aparezca Jordi Gual, presidente de CaixaBank desde 2016, según la mayoría de las fuentes consultadas. El que fuera sucesor de Fainé en la presidencia de una entidad financiera que era la tercera entidad española por volumen activos ha quedado desplazado por el presidente de la quinta entidad, Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.

Gual (Lleida, 1957) ha sido cuestionado recientemente en parte de los círculos financieros por oponerse a las fusiones bancarias y por tener que menguar los dividendos de CaixaBank, que financiaban a la Fundación Bancaria La Caixa, pese a que actuaba así cumpliendo las recomendaciones del Banco Central Europeo por la crisis económica derivada de la pandemia. Ahora podrá volver a su esencia los libros.

El economista, que se incorporó a La Caixa en 2005, es uno de los mayores expertos en sistemas bancarios, integración europea, regulación y competencia. Antes de presidir CaixaBank, fue el economista jefe y Director Ejecutivo de Planificación Estratégica y Estudios de CaixaBank y Director General de Planificación y Desarrollo Estratégico de CriteriaCaixa.