El Instituto Tecnológico Textil (Aitex), con sede central en Alcoy, acaba de recibir el Premio Nacional a la Innovación que concede la Confederación Española de Directores y Ejecutivos (Cede)

Se trata de un reconocimiento al papel que viene desempeñando el centro desde su fundación en 1985, hasta el punto de llevar a cabo una auténtica revolución en el sector, que le ha permitido situarse a la vanguardia en lo que respecta a tecnología y calidad en sus productos. El instituto cuenta con 55 plantas experimentales y 32 laboratorios, que trabajan en estos momentos para más de 5.000 clientes distribuidos por medio centenar de países. Su labor desde el inicio de la pandemia también está siendo decisiva, habiendo realizado 5.000 test para la homologación de mascarillas, prendas sanitarias y protectores faciales y oculares.

Aitex es el centro de referencia a nivel nacional en materia de investigación, innovación y servicios técnicos avanzados para las empresas del textil, aunque también se ha posicionado en primera línea a nivel internacional, como lo demuestra el hecho de que cuenta con oficinas en ocho países y que trabaja para clientes de todo el mundo. Dispone de 300 empleados entre Alcoy y València y 30 más fuera de España, todos ellos técnicos e investigadores. Con todo, su influencia se ha dejado notar de forma decisiva en su ámbito más cercano, y más en concreto en el clúster formado por las comarcas de l’Alcoià, El Comtat y la Vall d’Albaida, donde se aglutinan alrededor de 1.000 empresas.

Así lo señala el presidente del centro, el empresario alcoyano León Grau, quien no duda a la hora de afirmar que «toda la innovación de la zona se la debemos al instituto, que ha resultado decisivo para que contemos con un sector puntero capaz de competir con cualquiera a nivel internacional. Hay que tener en cuenta que las empresas de estas comarcas son de pequeño tamaño, y que consecuentemente casi ninguna puede contar con departamentos propios de I+D+i. Por tanto, todo el trabajo de investigación e innovación debe pasar por Aitex, cuya intervención está resultando decisiva para que se estén fabricando de productos con valor añadido».

Una muestra de la capacidad de influencia del instituto en la modernización del sector son los 14 ámbitos de actuación en los que trabaja en estos momentos, como son los médicos y hospitalarios, deporte y ocio, indumentaria, ropa de protección, automoción, transporte público, aeronáutica, hábitat, arquitectura textil, geotextiles, superficies deportivas, moda, cadena de valor textil y cosmética.

En lo que respecta a las actividades de investigación, Aitex ha firmado múltiples acuerdos bilaterales con centros de todo el mundo, participando en proyectos internacionales de I+D+i con el objetivo de generar conocimiento y aportar valor a las firmas del sector. En 2019, sin ir más lejos, se llevaron a cabo 165 proyectos de este tipo, en los que participaron 200 empresas y colaboraron 78 centros tecnológicos, universidades y asociaciones empresariales nacionales e internacionales.

Testeo para comprobar el impacto del frío en una prenda deportiva. |

Asimismo, Aitex, como agente activo del sistema internacional de investigación, ha participado en 21 proyectos de este ámbito, entre los que destaca el denominado Trust, que plantea la investigación y desarrollo de diferentes series de bioindicadores para determinar de forma masiva y rápida la eficacia de tecnologías de desinfección tales como la aplicación de vapor, calor por radiación o por contacto, ozono y radiación UV, sin la necesidad de recurrir a análisis con los propios virus y siendo aplicable sobre todo tipo de superficies textiles y afines. El proyecto en cuestión obtuvo la máxima puntuación en la evaluación de un total de más de 700 solicitudes de proyectos de I+D e inversión a nivel nacional, y quedó enmarcado dentro de las soluciones de higiene y desinfección, compitiendo frente a otras iniciativas de investigación en el ámbito farmacéutico y sanitario relacionados con la búsqueda de la vacuna, test de detección, equipamiento o terapias de la enfermedad.

León Grau, de hecho, destaca la gran labor llevada a cabo por parte del instituto en materia de prevención y lucha contra el covid, teniendo en cuenta que en el momento en que irrumpió la pandemia eran el único centro facultado y con el equipamiento necesario para la homologación de mascarillas y batas sanitarias. «Fuimos de la mano de la Generalitat, el Ministerio y la Agencia Española del Medicamento, trabajando 24 horas los siete días de la semana para atender la avalancha de solicitudes que nos llegaron. Se realizaron 5.000 test de mascarillas, prendas y equipos de protección, cuando en toda la vida del instituto apenas se habían realizado 50», precisa.

La labor de Aitex en este campo también resultó decisiva para la reconversión del sector y la generación del clúster sanitario de empresas textiles en l’Alcoià, El Comtat y la Vall d’Albaida. «Es un subsector que tiene muchas posibilidades y que tanto las empresas como el propio instituto queremos mantener», enfatiza.

Cabe reseñar, en este mismo apartado, que Aitex ofrece a las empresas las más modernas y únicas infraestructuras y equipos de laboratorio para la caracterización de sus productos, control de calidad y certificación, según las normas y estándares internacionales. De hecho, actualmente el instituto es uno de los centros de Europa con mayor alcance técnico de acreditación de la calidad de ensayos de laboratorio por la Entidad Nacional de Acreditación y su paraguas europeo.

Grau, por otro lado, resalta la labor que también está desarrollando el instituto para contribuir a la sostenibilidad en el sector. «El textil -subraya- es el responsable del 26% de las emisiones de CO2 a nivel mundial, y desde Aitex se está trabajando para que el sector sea respetuoso al máximo con el medio ambiente, con el desarrollo de tecnologías que reduzcan consumos energéticos y de agua, así como los residuos. En nuestra zona las empresas tienen mucha tradición de trabajar con materias recicladas, y no cabe duda de que el futuro debe caminar en esa dirección».

Otro de los campos en los que trabaja el instituto es en el de la formación, y una evidencia de ello son los más de 100 cursos con un total de 6.500 horas que se desarrollaron durante el ejercicio pasado. El centro lleva a cabo una importante tarea formativa de técnicos especializados para las empresas del sector, y colabora estrechamente con el ámbito universitario a través de la Cátedra Aitex-UPV y el máster de Ingeniería Textil, también con el campus alcoyano. También respalda la especialidad que se imparte en el instituto Cotes Baixes de la misma ciudad, facilitando que los alumnos hagan prácticas e incluso accedan a trabajar en las empresas. «Nuestro objetivo -destaca León Grau- es que los estudiantes vean al textil como un sector con futuro, con mucha tecnología y atractivos profesionales, dado que ahora nos encontramos con dificultades para encontrar mano de obra especializada».

Aitex funciona como una organización sin ánimo de lucro y factura 30 millones de euros al año que sirven para financiar su funcionamiento y acometer inversiones en la compra de maquinaria y la puesta en marcha de nuevos proyectos. El presidente de la entidad incide en que este año, como consecuencia de la pandemia, han bajado las actividades habituales del instituto, aunque, por contra, se han incrementado las relacionadas con las prendas sanitarias. «Aitex -señala- presenta una situación financiera muy sólida y cuenta con capacidad de inversión. Las nuevas líneas que se están abriendo, como la del material sanitario o la de cosmética, tienen mucho futuro, y el personal, además, está motivado y ha respondido de manera ejemplar a la crisis que estamos viviendo. Las previsiones en cuanto a facturación son optimistas, hasta el punto que acabará creciendo un 10% en relación al año pasado».

Respecto al momento que vive el sector en este contexto marcado por la incertidumbre, Grau destaca que el textil-hogar, mayoritario en la zona, «está funcionando bastante bien, porque la gente, a raíz de la emergencia sanitaria, se ha quedado mucho en casa, y ha decidido invertir en cortinas, sofás y edredones».

Uno de los laboratorios del instituto tecnológico en Alcoy. |