La creciente complacencia y exuberancia de los mercados supone un importante riesgo financiero dado el persistente y duradero respaldo oficial monetario desplegado para contrarrestar la crisis desatada por la pandemia y las expectativas generadas por las vacunas, subrayó este miércoles el Fondo Monetario Internacional (FMI).

"Con los inversores apostando por un respaldo persistente político, un espíritu de complacencia parece estar permeando en los mercados", afirmó Tobias Adrian, director del Departamento de Mercados de Capitales, al presentar en rueda de prensa la actualización del informe de Estabilidad Financiera Global.

"Emparejado con visiones de los inversores aparentemente uniformes, esto aumenta el riesgo de una corrección o reevaluación de los precios", agregó Adrian.

Excesiva toma de riesgos

El informe remarcó que el respaldo monetario sin precedentes a nivel global es necesario dada la gravedad de la crisis por la pandemia de la covid-19 y que se mantendrá en el futuro próximo.

No obstante, reconoció que aunque "no hay alternativa por ahora", sí que genera "preocupaciones legítimas sobre la toma de riesgos excesiva y la exuberancia en los mercados". "Esta situación crea un difícil dilema para los encargados de la formulación de políticas", advirtió.

Los grandes bancos centrales, como la Reserva Federal (Fed) de EEUU, el Banco Central Europeo (BCE) o el Banco de Japón, se encuentran inmersos en programas extraordinarios de estímulo monetario con compras masivas de deuda y tipos de interés a 0%, o incluso niveles negativos.

Desigualdad en el acceso a las vacunas

A ello se suma el impulso dado por el inicio de la administración de las vacunas en varios países. "Los precios de las acciones, los bonos corporativos y otros activos de riesgo -remarcó Adrian- han aumentado con las noticias de los lanzamientos de vacunas".

En este sentido, apuntó el problema adicional que comienza a vislumbrarse ahora respecto a la desigual distribución de las vacunas, especialmente los retrasos que encaran los países emergentes y en desarrollo. Este retardo en el acceso a las vacunas del mundo en desarrollo, que supone casi dos tercios de la población mundial, tiene importantes implicaciones económicas. "El acceso tardío a soluciones de salud podría implicar una recuperación global incompleta y poner en peligro el sistema financiero global", sostuvo el informe.

Un súbito ajuste de las condiciones financieras en las economías avanzadas provocado por el repunte económico tras la vacunación agravaría las vulnerabilidades en los mercados emergentes por sus altos niveles de deuda pública y empresarial.

Grandes divergencias

El FMI revisó este martes al alza las previsiones de crecimiento económico global al 5,5% en 2021 en su actualización de su perspectivas globales. El pronóstico es tres décimas más que lo anticipado en octubre, aunque el organismo advirtió sobre las grandes divergencias en la recuperación y la consiguiente alza en la desigualdad.

"Lo que estamos viendo son velocidades de recuperación muy distintas. Y un golpe mucho más fuerte en las economías en desarrollo, comparados con los niveles previos a la pandemia, que en los avanzados", explicó Gita Gopinath, economista jefe del Fondo, en entrevista con Efe este martes.

Las dos grandes economías mundiales, EEUU y China, se expandirán un 5,1% y un 8,1%, respectivamente, según los nuevos cálculos del Fondo. "China regresó a sus niveles proyectados de antes de la pandemia en el cuarto trimestre del año, por delante de todas las grandes economías. EEUU se prevé que sobrepase sus niveles pre-covid este año, mucho antes de la zona euro", sostuvo Gopinath.

Aunque el colapso global de 2020 del 3,5% es algo menos pronunciado que lo proyectado en octubre (4,4%) sigue siendo la peor contracción global en época de paz desde la Gran Depresión.