Los sindicatos CC OO y UGT protagonizaron ayer una concentración ante la Subdelegación del Gobierno de Alicante, en el marco de una campaña nacional a través de la cual se pretende instar al Gobierno a derogar las reformas laboral y de las pensiones, así como a incrementar el salario mínimo interprofesional. Dirigentes de ambas organizaciones destacan que los cambios propuestos son fundamentales para combatir el alto nivel de precariedad que se registra en la provincia.

La campaña, bajo el nombre de «Ahora sí toca», se desarrolló ayer ante las subdelegaciones de Gobierno de todas las capitales españolas. En el caso de Alicante, la concentración tuvo lugar al mediodía en la plaza de la Muntanyeta, y a la misma asistieron alrededor de 50 sindicalistas, manteniendo las distancias de seguridad exigidas por la actual situación de pandemia.

La secretaria general de CC OO en l’Alacantí-Les Marines, Consuelo Navarro, resaltó la necesidad de «retomar la agenda sociolaboral, de manera que el diálogo se pueda transformar en resoluciones». La dirigente sindical llamó la atención sobre la negativa incidencia que las reformas tanto laboral como de pensiones han tenido en la provincia de Alicante, «donde estamos sufriendo unos altos índices de precariedad». También resaltó la importancia de incrementar el salario mínimo interprofesional a más de 1.200 euros al final de la legislatura, dado que «es la referencia tanto de las pensiones como de las cotizaciones y prestaciones».

En parecidos términos se expresaba la secretaria de UGT en estas mismas comarcas, Yaissel Sánchez, sobre la base de que, «después de un año de covid, y con la perspectiva de las vacunaciones, ya toca abordar estas cuestiones que, además, venían recogidas en el programa de gobierno». Según sus palabras, «la reforma laboral ha sido totalmente negativa, hasta el punto que los contratos de menos de una semana en la provincia, por poner un ejemplo, se han incrementado de manera exagerada».

La derogación de la reforma de pensiones también se considera imprescindible para que los pensionistas recuperen poder adquisitivo, mientras que, en el caso del salario mínimo interprofesional, «debemos igualarnos a la actual realidad europea».

Los sindicatos le hicieron entrega de un manifiesto con sus reivindicaciones a la subdelegada del gobierno, Araceli Poblador, quien se comprometió a trasladarlas al Ejecutivo central. «La verdad es que siempre se ha mostrado muy atenta con nosotros», reconocieron las dos representantes sindicales.

Los dirigentes nacionales también participaron de forma activa en el inicio de la campaña. Así, el secretario general de CC OO, Unai Sordo, señalaba desde Madrid que «nos concentramos para decir al Gobierno que ‘Ahora sí toca’ recuperar una agenda social para que la salida de la crisis no tenga como consecuencia el aumento de la desigualdad y la pobreza».

Por su parte, el secretario de UGT, Pepe Álvarez, denunciaba que las medidas tomadas para hacer frente a la pandemia «no han sido ni de lejos suficientes», y que miles de personas en España «no tienen para vivir. Estamos hartos de que todo sean promesas y de que el BOE no las publique en forma de normas».