El calzado, principal sector exportador de la provincia, continúa sin poder levantar cabeza. La tercera ola de coronavirus se ha ensañado de manera especialmente virulenta con esta industria, hasta el punto que las restricciones tanto sociales como comerciales vigentes en todo el mundo propiciaron que sus ventas al exterior cayeran un 26% el pasado mes de enero. El problema añadido es que este descenso lastró la recuperación de las exportaciones alicantinas, dado que el buen comportamiento mostrado por sectores como el de las hortalizas, los materiales eléctricos o los juguetes no sirvió para compensar la balanza.
El último informe del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) correspondiente a enero revela que las ventas de la provincia al exterior retrocedieron un 11,8% con relación al mismo mes del año pasado, situándose en 412 millones de euros. A la cabeza de este descenso, con una caída del 26% y un resultado de 87 millones de euros, se encuentra el calzado, que desde el inicio de la pandemia se está evidenciando como el sector más afectado por la crisis en envíos al exterior.
La presidenta de la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), Marián Cano, justifica esta situación con «las restricciones tanto comerciales como sociales que siguen vigentes en muchos países. Como hemos venido señalando, el sector de la moda en general acumula desde el inicio de la crisis sanitaria caídas de ventas que oscilan entre el 30% y el 40%, y, mientras no se extiendan las vacunas y regresen las relaciones sociales, vamos a seguir sufriendo».
Cano, con todo, también resalta que este descenso del 26% en las ventas al exterior es en comparación al mes de enero de 2020, «cuando todavía no había llegado la pandemia y nos movíamos en números normales».
Las exportaciones de verduras también cayeron un 4%, para quedar situadas en 46 millones de euros; las materias plásticas en un 13%, con un balance de 24 millones; el aluminio en un 6% y un resultado de 21 millones; las conservas de verduras y zumos en un 11%, quedándose en 16 millones; los vehículos en un 16%, para situarse en 12 millones; y la maquinaria en un 9% y un balance de 8 millones.
En el lado contrario se situaron las hortalizas, con un crecimiento de las ventas del 25% y un resultado de 46 millones; los aparatos y materiales eléctricos, con un aumento del 41% y un balance de 12 millones; y los juguetes, con una subida del 12% y 8 millones.
Estos incrementos, con todo, no sirvieron para compensar las caídas, principalmente del calzado, que es el principal sector exportador de la provincia y lastra sus resultados. De hecho, mientras en Alicante las ventas al exterior retroceden, en el conjunto de la Comunidad Valenciana crecen un 2,8%.
Los envíos a Reino Unido y EE UU resisten pese al Brexit y los aranceles
Las exportaciones alicantinas registraron en enero notables incrementos tanto a Estados Unidos como al Reino Unido. En el primer caso fue del 32% y en el segundo del 10%, y todo ello a pesar de complicaciones como los aranceles aún vigentes de Trump y el Brexit. También fue muy reseñable el aumento del 8% en las ventas a los Países Bajos y Suiza. En el otro lado se sitúan las caídas del 25% a Bélgica, 23% a Portugal, 15% a Polonia, 8% a Italia, 5% a Alemania y 1% a Francia.
En lo que respecta a la balanza comercial, hay que reseñar que el saldo fue claramente favorable a la provincia de Alicante, dado que las importaciones en el mes de enero quedaron situadas en 307 millones de euros, frente a los 412 millones de ventas al exterior.
