La Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT) es un organismo autónomo adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, creado en el año 1927, cuya finalidad es el abastecimiento de agua potable a 80 municipios que se localizan en tres comunidades autónomas (Murcia, Castilla - La Mancha y Comunidad Valenciana) y dos demarcaciones hidrográficas, (Demarcación Hidrográfica del Segura y del Júcar). La población abastecida es aproximadamente de 2.400.000 habitantes, que en época estival se aproxima a los 3.100.000.

En los últimos años ha resultado más complicado que nunca mantener el servicio de agua potable... ¿Cómo lo han conseguido?

Llevamos dos años difíciles. En 2019 nos vimos afectados por la DANA, un fenómeno que nos afectó tanto por su intensidad como por su amplitud en prácticamente todo el sistema de producción y distribución del agua y que ocasionó graves desperfectos.

Afortunadamente, y gracias a la robustez del sistema y su versatilidad se pudo garantizar el abastecimiento a todos los municipios, y salvo episodios puntuales no faltó agua para que los ayuntamientos pudieran distribuirla a la población.

Es de destacar la profesionalidad y la implicación de los empleados públicos en este proceso, que pasando incluso situaciones difíciles y de peligro a nivel personal, estuvieron en todo momento trabajando para mantener el funcionamiento de las instalaciones.

Hubo también una respuesta rápida del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a nivel de disponibilidad de fondos como de tramitación, que permitió disponer de 7 millones de euros para reparar y reponer todas las infraestructuras afectadas.

La disponibilidad de recursos hídricos la hemos tenido que gestionar en función de cada situación en cada momento, fundamentalmente incrementando la desalación cuando los recursos del trasvase han disminuido.

A lo largo de este último año, con la declaración del estado de alarma debido a la pandemia, hemos tenido que abordar una situación inédita para todos. Venimos aplicando una serie de protocolos para garantizar el funcionamiento de todo el sistema y, sobre todo, garantizar la máxima seguridad para todos los empleados públicos. La incidencia entre los trabajadores ha sido muy escasa y se ha podido garantizar el servicio de abastecimiento en todo momento.

Disponer de agua en todos los hogares ha resultado fundamental como medida higiénica frente al covid y en ese sentido se consideró este servicio como servicio esencial. Pese a las muchas dificultades, una vez más la dedicación y la profesionalidad de todos los empleados públicos ha permitido que no faltara agua para ninguno de los 80 municipios a los que abastecemos.

El covid-19 también ha provocado una crisis económica. ¿Se ha notado en el consumo del agua en su demarcación?

Lógicamente se ha notado una disminución en el consumo en los primeros meses del estado de alarma, que motivaron un parón en la actividad socioeconómica, fundamentalmente en los municipios costeros, zonas de mayor demanda turística.

El periodo de abril-agosto de 2020 sufrió una reducción de consumo, pero a partir de septiembre se ha ido normalizando y en la actualidad el consumo no se diferencia de otros años.

¿Qué opina de tener que usar cada día más agua desalada?

La desalación da seguridad al sistema de abastecimiento. En ese mix de recursos que gestiona la MCT (agua del río Taibilla, del trasvase Tajo-Segura y de desalación), está la clave para satisfacer la demanda de los 80 municipios que se abastecen. También esa combinación de recursos garantiza la estabilidad de la tarifa que se aplica y que se mantiene fija en los últimos cinco años.

¿Cómo se aseguran de realizar una gestión sostenible del agua?

Intentando ser cada día más eficientes en la gestión de todo el sistema de distribución (para evitar pérdidas de agua), en los sistemas de producción, racionalizando procesos, aplicando normas de calidad, etc. Nuestro reto es avanzar en la eficiencia energética y en la reducción de la huella de carbono para contribuir a los objetivos que tiene marcados nuestro Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

También debemos avanzar en facilitar una mejor información, en llegar al ciudadano para implicarlo y concienciarlo de la necesidad del ahorro del agua y de la conservación de los ecosistemas acuáticos y de los recursos hídricos. Fechas como hoy que celebramos el Día Mundial del Agua han de servirnos también para reflexionar sobre esto.