Las medidas puestas en marcha para hacer frente a la tercera ola de la pandemia de la covid-19 ahondaron la caída de la contratación laboral en España, especialmente acusada en el sector servicios con un descenso interanual del 36% en el mes de febrero, lastrado por el sector hostelero.

Según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) recopilados por Efe, en febrero se firmaron en total en España 1,2 millones de contratos, un 24,5% menos que en el mismo mes de un año antes cuando rozaban los 1,6 millones.

La caída fue más acentuada en el sector servicios con 688.641 contratos, frente a los 1.082.282 de hace un año, un descenso del 36%. Y analizando por negocios, volvió a mostrar el desplome en la hostelería, donde solo se firmaron 57.570 contratos, un 80% menos que los 290.908 de febrero de 2020.

Se trata de porcentajes de descenso similares a los de enero, aunque en el caso de los servicios y el sector hotelero se acentuó ligeramente: la contratación de trabajadores en el primero disminuyó un 34,2% en enero, y en el segundo, el 77,7% interanual.

Tras estos descensos, al igual que viene ocurriendo desde marzo del año pasado, está el frenazo en el empleo en los servicios de alojamiento y restauración, que en febrero volvieron a sufrir restricciones para intentar frenar un nuevo repunte de la pandemia. Unas medidas que también llevaron a un incremento de los trabajadores en ERTE, hasta los 900.000, la mitad de ellos en el sector hostelero, y a un alza del paro que superó los 4 millones ese mes, una cifra que no se veía desde abril de 2016.

Un año de caídas

Los datos de febrero suponen encadenar un año de descensos en el volumen de contratos firmados, otro de los indicadores del impacto de la crisis en el mercado laboral español donde, antes del estallido de la pandemia, cada mes se venían firmando alrededor de 2 millones de contratos, reflejo también de una elevada rotación.

Así, 2020 terminó con un descenso del 29,3% en el número de contratos firmados con 15,9 millones de acuerdos laborales, 6,6 millones menos que en 2019 y el mínimo de esta serie en siete años. En los meses más duros del confinamiento -entre marzo y junio- el número de acuerdos firmados se redujo a la mitad, un retroceso que se fue moderando en los siguientes meses hasta esos niveles entorno al 20 %-30 % que se mantienen.

De cara a los próximos meses, es previsible que las caídas ya no lo sean tanto, debido a que se comenzarán a comparar con los meses de mayor impacto de la pandemia en pleno confinamiento. Para la próxima campaña de Semana Santa, Randstad ha señalado que se podrán firmar unos 88.420 contratos laborales en España, lo que supone una caída del 1,6% respecto a la campaña de 2020, pero un descenso del 56% si se compara con la última Semana Santa en normalidad, que fue la de 2019. "Las restricciones a la movilidad y el cierre perimetral de las comunidades autónomas provocarán esta caída", apuntaba la compañía en un reciente informe.

De vuelta a los datos de febrero, del total de contratos registrados, 132.431 tuvieron carácter indefinido, cerca del 11% del total. Del resto de los contratos, 6.466 tuvieron carácter formativo y 1.073.387 fueron temporales. Dentro de este último grupo, como suele ser habitual, uno de cada cuatro no llegó a la semana de duración.