Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La construcción de nuevas viviendas arranca el año con una caída del 43%

El Colegio de Aparejadores emite entre enero y marzo 1.178 visados de inicio de obra, frente a los 2.068 del ejercicio pasado - La Vega Baja y el Baix Vinalopó acumulan los mayores descensos, mientras sube la actividad en la Marina Alta y Baixa

Un edificio en construcción en la ciudad de Alicante.

El sector de la construcción, uno de los principales motores económicos de la provincia, sigue al ralentí y amenaza con pararse en los próximos meses, si la situación no mejora. Los retrasos acumulados en las tramitaciones durante el confinamiento, la caída de las reservas sobre plano al no poder llegar los compradores por las restricciones de movilidad, y la incertidumbre que todavía pesa sobre la situación económica han provocado que los promotores mantengan la cautela y que el año haya arrancado con un nuevo descenso en el inicio de nuevos proyectos.

En concreto, según los datos del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Alicante, entre enero y marzo los empresarios solicitaron visados para iniciar 1.178 nuevas viviendas en la provincia, frente a las 2.068 del mismo periodo del año anterior, un 43% menos. Aunque en términos absolutos la cifra supone una mejora sobre las que se venían registrando desde el estallido de la pandemia -en el segundo trimestre del año pasado se pusieron en marcha, 929 casas; en el tercero, 955; y en el cuarto, 1.074-, en la comparativa interanual el descenso del 43% supone un empeoramiento de la situación que se dio en la segunda parte de 2020. En ese momento la caída parecía atenuarse desde el 47% contabilizado en el confinamiento, hasta el 26,5% registrado en los últimos meses del ejercicio.

«La tendencia no es buena, sobre todo porque la caída del número de visados anticipa un descenso de la actividad del sector, lo que se traducirá en menos empleo en las obras y también menos pedidos a proveedores», señala el presidente del Colegio de Aparejadores, Martín Pomares, que recuerda que en el último año la construcción ha mantenido un nivel relativamente estable gracias a los proyectos que ya estaban en marcha y que se han seguido ejecutando.

Una paulatina paralización del sector en los próximos meses de la que también advierten desde la Asociación Provincial de Promotores (Provia), que reclama mayor agilidad a los ayuntamientos para que, en el momento en que se normalice la demanda, se pueda retomar rápidamente el inicio de nuevos proyectos.

A la espera de que el paso de los meses y el avance de la vacunación despejen las incógnitas, los datos del primer trimestre del año reflejan que el Baix Vinalopó y la Vega Baja son las comarcas que han recibido el mayor golpe. Así, en el primer caso la caída llega al 70,8%, marcada sobre todo por los malos datos de Santa Pola, donde apenas se han empezado a construir dos nuevas viviendas entre enero y marzo, frente a las 200 del primer trimestre de 2020. También cae la cifra en Elche, de 122 a 90. Por su parte, en la Vega Baja el desplome es del 61,8% y, en este caso, destaca la paralización que parece sufrir la obra en Orihuela, donde se ha pasado de iniciar 20 promociones con 350 viviendas, a sólo 11 nuevos proyectos con 48 inmuebles. No obstante, los descensos también son significativos en Torrevieja (de 167 a 113 visados), Rojales (de 40 a 8) o Pilar de la Horadada, donde se pusieron en marcha 42 casas frente a las 101 del año pasado. Mientras, se mejora en Guardamar.

Por otra parte, en el área metropolitana de Alicante la caída del primer trimestre fue del 30,7%, aunque con diferencias: subió ligeramente la construcción en la capital, donde se iniciaron 245 viviendas frente a las 231 de 2020, mientras se desplomó en El Campello. En el interior de la provincia la caída fue del 39,4% y las únicas comarcas donde aumenta la actividad son la Marina Alta y Baixa, aunque, de nuevo, con diferencias: los visados aumentan en Altea, Finestrat, La Vila o Xàbia, pero bajan en Dénia y, especialmente, en Calp.

A la espera de la demanda embalsada

El secretario general de Provia, Jesualdo Ros, señala que el sector confía en que la normalización de la situación sanitaria y la recuperación de los enlaces aéreos permitan reactivar las ventas. «El interés no ha bajado y existe mucha demanda embalsada que contribuirá a que las cifras mejoren», asegura Jesualdo Ros. El problema es que, desde que se recupera la demanda hasta que eso se traduce en una mayor actividad en la obra, con la puesta en marcha de nuevos proyectos, pueden transcurrir meses en los que el volumen de trabajo y de empleo en el sector se podría resentir, señala el portavoz empresarial.

Primer certificado privado para acelerar las licencias

Las entidades colaboradoras podrían triplicar la capacidad de los ayuntamientos

El Colegio Territorial de Arquitectos de Alicante anunció el lunes que ha emitido su primer certificado de conformidad como Entidad Colaboradora Urbanística (ECUV) de la Generalitat, un mecanismo con el que la Administración autonómica pretende aligerar la tramitación de licencias de obras en los ayuntamientos, para acabar con el actual atasco que afecta a muchos de ellos. El objetivo es que estas ECUV puedan garantizar que el proyecto cumple la normativa de forma que, acompañados de la cédula de garantía urbanística, sus certificados equivalgan al preceptivo informe de los servicios técnicos municipales y no haga falta esperar este trámite. 

Desde el Colegio de Arquitectos aseguran que, con este nuevo sistema, se podría multiplicar por tres la capacidad de los ayuntamientos de aprobar licencias, lo que redundará en una mayor actividad en el sector de la construcción y en el resto de negocios que se benefician de él. 

En este primer caso, la beneficiada ha sido Somium, la promotora del Grupo Marjal, que ha visto acelerada la licencia para una vivienda unifamiliar de obra nueva en Orihuela Costa. No obstante, desde el Colegio de Arquitectos señalan que los informes de las ECUV también pueden aplicarse a las licencias para rehabilitación, lo que también contribuirá a acelerar este subsector del sector de la construcción. 

El retraso en la tramitación de las licencias urbanísticas es una de las principales quejas de los promotores, que ven demorar sus proyectos durante meses por la falta de personal de muchos ayuntamientos. 

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats