El Gobierno se ha comprometido con Bruselas a tener negociado y aprobado este año el nuevo sistema de ertes poscovid. Así lo recogen las fichas del Plan de Recuperación y Resiliencia hechas públicas este miércoles por Moncloa, que, no obstante, no aclaran si este nuevo formato ya entrará en vigor en la recta final de este ejercicio o lo hará a partir del 1 de enero del 2022. El resto de las principales políticas que incluye el componente 23 del Plan, el referente al ámbito laboral, son la derogación parcial de la reforma laboral del PP, que estará ya en vigor antes de acabar este año, y los cambios en el sistema de prestaciones por desempleo, que lo deja para el 2022.

Este jueves el Gobierno y los agentes sociales vuelven a sentarse a negociar una prórroga de los ertes covid, que vencen el 31 de mayo y que actualmente dan cobertura a casi 640.000 trabajadores. No obstante, el Ejecutivo tiene en mente transitar de ese modelo excepcional para la emergencia sanitaria hacia uno estable y consolidado en el Estatuto de los Trabajadores. Su idea es hacer de este nuevo formato un alternativa al despido y tratar de minimizar las destrucciones de ocupación cuando la economía se contrae o entra en crisis.

Y para ello creará dos tipologías de erte. Uno para aquellas empresas con una pérdida de actividad temporal, pero cuyo modelo de negocio no está en riesgo, y otro para aquellas compañías que necesiten reestructurarse porque su mercado ha cambiado y deben reorientar su operaciones. Los detalles de estos dos modelos y el alcance que estos tendrán todavía es algo que el Gobierno deberá negociar con patronal y sindicatos, tal como reconoce en su Plan de Recuperación.

No obstante, esa negociación tendrá inicio y fin este 2021, pues el compromiso manifestado ante Bruselas es que la modificación del artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores estará ya en el BOE antes de finalizar el ejercicio. Lo que no es incompatible con la introducción de un periodo de transición que podría retrasar hasta el 2022 su entrada en vigor. Fuentes consultadas del Ministerio de Trabajo no detallan si la prórroga de los ertes covid que comenzarán a negociar el jueves con los agentes sociales será la última o todavía habrá otra más hasta transitar definitivamente hasta el esquema de ertes poscovid.

La hucha de los ertes

El nuevo esquema de ertes mantendrá ayudas públicas para garantizar las prestaciones por desempleo a los trabajadores afectados y exonerar de costes laborales a las empresas que mantengan los contratos. Las exoneraciones covid actualmente en vigor van desde el 70% hasta el 100% y las nuevas cuantías no aparecen detalladas en los documentos de Moncloa. El Gobierno sí ha avanzado a Bruselas cómo pretende financiar este nuevo mecanismo. La fórmula será un fondo tripartito, una especia de hucha de los ertes que se nutrirá de las aportaciones del Estado, las empresas y las cotizaciones de los trabajadores.

"Es preciso crear un instrumento de financiación permanente, que se debe financiar con aportaciones de empresas, trabajadores y Estado, que proporcione los recursos necesarios para la remuneración y formación de los trabajadores, en especial en fases recesivas graves que se puedan producir en el futuro", reza el detalle de la reforma seis del componente 23.

Como es habitual a lo largo del Plan de Recuperación, el detalle concreto de las medidas brilla por su ausencia. ¿Cuánto pagará cada uno de los actores a ese fondo? No consta en el documento. Sí que se aprovecharán las épocas de bonanza para acumular el excedente de las cotizaciones para el desempleo -actualmente del 7,05%- para ir llenando esa hucha y gastarla luego durante los momentos de crisis. El Gobierno no detalla si prevé subir esa aportación del 7,05% para costear el nuevo sistema.