Los contactos al más alto nivel para evitar los aranceles de EE UU al calzado se están intensificando en los últimos días, y además parece que empiezan a aportar ciertas dosis de esperanza al sector. Este es el caso de la reunión que el lunes mantuvo en Alicante la patronal con la ministra de Industria, Reyes Maroto, quien se mostró dispuesta a estudiar una propuesta de los propios empresarios en el sentido de diferir la aplicación de la Tasa Google, que es la que está generando el conflicto, hasta que se cierren las negociaciones que se mantienen en el seno de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Desde el calzado insisten en reclamar al Gobierno mensajes de certidumbre a los compradores estadounidenses, que sirvan para reactivar los pedidos.
La reunión se celebró en la sede de la Subdelegación del Gobierno en Alicante, y a la misma asistió una representación del sector encabezada por la presidenta de la Federación Industrial del Calzado de España (Fice) y de la Asociación Valenciana del Calzado (Avecal), Marián Cano; los alcaldes de Elche y Elda, Carlos González y Rubén Alfaro, respectivamente, municipios donde esta industria tiene un gran peso económico; y la subdelegada del Gobierno, Araceli Poblador. El objetivo era abordar la amenaza del Gobierno de Biden de aplicar una subida de hasta 25 puntos en los aranceles para esta industria, como respuesta a la denominada Tasa Google, con la que se pretende gravar a las multinacionales tecnológicas en España.
La ministra señaló, a este respecto, que los aranceles en cuestión están de momento suspendidos por parte de EE UU, y que «las noticias que tenemos en este ámbito son positivas, con una suspensión que podría llegar a ser definitiva, teniendo en cuenta la predisposición del Gobierno norteamericano para abordar el asunto de la tasa digital en el ámbito de la OCDE».
Maroto, en este sentido, aseguró que «vamos a seguir defendiendo a las empresas españolas y valencianas del calzado ante cualquier represalia que se produzca en EE UU o en cualquier mercado. Nuestro sector exportador es un sector que no solo hemos protegido durante la pandemia, sino que queremos potenciar con un nuevo plan de internacionalización que aprobaremos este martes en el Consejo de Ministros».
LA CIFRA 5.000 Empleos en riesgo Los aranceles tendrían un fuerte impacto en el sector.
La presidenta de la patronal, Marián Cano, agradeció la predisposición de la ministra, aunque insistió una vez más en la necesidad de que se manden mensajes de confianza. «Hemos pedido urgencia, porque estamos en una cuenta atrás al ser un sector con unos períodos muy marcados y necesitamos que nuestros clientes ganen en certidumbre para activar los pedidos que en estos momentos están paralizados», resaltó Cano, quien recordó que en el plazo de tres semanas podrían empezar a producirse cierres de empresas, y que alrededor de 5.000 empleos están en riesgo.
Para los empresarios, el mejor mensaje que se podría mandar a los mercados sería retrasar la Tasa Google. «Lo que le hemos solicitado a la ministra -añadió- es la introducción, en el reglamento de la tasa, de una disposición transitoria que permita diferir su aplicación mientras se llega a un acuerdo en el marco de la OCDE, lo que sin duda también sería un apuesta por la multilateralidad». Marián Cano destacó que Maroto «se ha mostrado muy receptiva a la propuesta, y se ha comprometido a trabajar en esa posibilidad para trasladar el mensaje que permita que los compradores tengan la confianza de que podrán reactivar los pedidos».
Por su parte, el alcalde de Elche, Carlos González, destacó que el compromiso de la ministra «es poner en marcha todos los mecanismos posibles para conseguir la pronta resolución de este conflicto comercial con EE UU y, sobre todo, lanzar esos mensajes que generen certidumbre entre los operadores y que permitan salvar la temporada».
En parecidos términos se expresó el alcalde de Elda, Rubén Alfaro, quien indicó que Maroto «nos ha trasladado que tanto el Gobierno de Estados Unidos como el de España están hablando y saben perfectamente cuál va a ser la solución al conflicto, pero es verdad que hay que dar más pasos para generar confianza en los operadores, que son quienes nos compran los zapatos en el país norteamericano».
