El Estado acumuló un déficit de 35.665 millones de euros en el primer semestre, un dato que equivale al 2,95 % del PIB y que es un 25,9 % inferior al del mismo periodo de 2020, que ya estaba afectado por las consecuencias de la pandemia.

De acuerdo con los datos publicados este viernes por el Ministerio de Hacienda, la reducción del déficit estatal en la primera mitad del año estuvo relacionada con un fuerte repunte de los ingresos, que crecieron un 15 %, mientras que los gastos se mantuvieron estables, con una pequeña reducción del 0,1 %.

Entre enero y junio, el Estado registró unos ingresos de 94.341 millones de euros, un 15 % más, un porcentaje que sería aún mayor si se descuenta el efecto contable de la reversión al Estado de dos tramos de autopistas de peaje en 2020.

Los ingresos tributarios se dispararon un 20,6 %, hasta los 80.611 millones de euros, en comparación con 2020, si bien hay que tener en cuenta que en ese ejercicio el estado de alarma paralizó durante semanas buena parte de la actividad no esencial.

IRPF

La recaudación por el IRPF se situó en 18.327 millones, un 31,5 % más -el repunte sería del 10,7 % si no se tiene en cuenta el diferente calendario de entregas a cuenta a las comunidades autónomas-; la del IVA, en 39.738 millones, un 16,8 % más, y la del impuesto de sociedades, en 9.213 millones, un 42,1 %, en parte por los 1.100 millones extraordinarios de la fusión de dos grandes entidades.

Más allá de los grandes impuestos, en junio se consignan los primeros datos de recaudación del impuesto sobre determinadas transacciones financieras -en vigor desde enero pero que no empezó a abonarse hasta junio-, del que se ingresaron 128 millones.

Además, aumenta un 29,6 % la recaudación del impuesto sobre primas de seguro -cuyo tipo pasó del 6 % al 8 % en enero- y en un 27,5 % los ingresos procedentes de las subastas de derechos de emisión de gases de efecto invernadero.

Se mantienen los gastos

Los gastos se mantuvieron estables en la primera mitad del año, en 130.006 millones, un 0,1 % menos, también afectados por la reversión de autopistas y por el gasto asociado a la pandemia, que en el primer semestre sumó 5.351 millones, lejos de los 15.639 millones de un año antes.

En el primer semestre se redujeron un 10,1 % los consumos intermedios -por el menor gasto en la pandemia-, mientras que la remuneración de asalariados creció un 4 %.

En términos primarios -es decir, sin tener en cuenta el coste de la deuda-, el déficit del Estado se situó en 24.038 millones de euros, un 34,8 % menos y equivalente al 1,99 % del PIB.

Datos consolidados

Hacienda también ha publicado los datos consolidados de ejecución presupuestaria del conjunto de administraciones públicas -salvo las locales- hasta mayo, que arrojan un déficit de 36.036 millones de euros, un 27,5 % menos que un año antes y equivalente al 2,98 % del PIB.

Hacienda advierte de que la comparación de los datos de ambos ejercicios no es homogénea, ya que corresponde a distintos momentos de la pandemia.

Al cierre de mayo, la mayor parte del déficit se concentraba en la administración central, con 31.327 millones, un 4,7 % menos y un 2,59 % del PIB.

Los fondos de la Seguridad Social acumularon en los cinco primeros meses del año un déficit de 2.971 millones -un 80 % menos que en 2020 y equivalente al 0,25 % del PIB-, mientras que las comunidades autónomas redujeron un 11,6 % su déficit, hasta los 1.738 millones, un 0,14 % del PIB.