En un mundo globalizado donde los recursos naturales son limitados cobran cada vez más importancia los criterios socialmente responsables. La Inversión Sostenible lleva tiempo implantada en entornos profesionales y en inversores institucionales. Desde hace unos años, el inversor de a pie también empieza a sentirse identificado con los criterios de inversión sostenible y, en especial, las nuevas generaciones están cada vez más sensibilizadas con el concepto de que la inversión sostenible es un mecanismo más para cambiar el mundo.

Por ello, Caja Rural Central combina el análisis financiero con los criterios de sostenibilidad en las decisiones de inversión, lo que supone una forma más de contribuir a generar unas expectativas de rentabilidad más consistentes en el largo plazo y además ayudar a la preservación de nuestro planeta.

Para cumplir con este objetivo, Gescooperativo, la gestora de fondos de inversión de Caja Rural Central, pretende actuar en consonancia al ADN de la entidad, es decir, darle la misma importancia a la rentabilidad social como a la económica, ya que cada vez la sociedad demanda más las acciones éticas y socialmente responsables. Y lo materializa a través de la inversión socialmente responsable (ISR), la cual incorpora criterios Ambientales (gestión del agua o biodiversidad), Sociales (igualdad y derechos humanos) y de Buen Gobierno (negocios éticos) (ASG) en la toma de decisiones de inversión. Busca generar rentabilidad en el largo plazo, haciendo que las inversiones tengan un impacto positivo en la sociedad.

Los valores éticos de CRC es una de las mayores ventajas por las que invertir en fondos sostenibles

Una de las principales razones por las que invertir en los mencionados fondos sostenibles de Caja Rural Central es el ideario ético que los compone. Así, encontramos dos tipos de criterios de inversión: el excluyente, que especifica que no se invertirá en valores de emisores que atenten contra los derechos humanos fundamentales (sean la explotación laboral de menores, la publicidad o distribución de pornografía), fabriquen material armamentístico, destruyan el medio ambiente y que no hagan una defensa de la salud pública (venta de alcohol o tabaco, etc.).

Por otro lado, el criterio valorativo, el cual apoya la inversión en empresas que contribuyan positivamente al desarrollo del ideario Socialmente Responsable del fondo, como políticas medioambientales (energías renovables, control de la contaminación, control del gasto energético), la responsabilidad social (respeto a los derechos humanos, a un trabajo digno, generación de empleo estable en regiones más desfavorecidas…) y Gobernanza Corporativa (transparencia en la gestión, procesos de auditorías sociales y medioambientales, ausencia de prácticas ilegales, etc).

Cuatro perfiles; cuatro fondos

CRC cuenta con fondos de inversión que se gestionan con criterios de inversión socialmente responsable, combinando activos de renta fija pública y privada y renta variable, con una distribución geográfica muy diversificada, inversiones en bonos verdes y en temáticas sostenibles. Los fondos de inversión sostenibles de CRC se adecuan al perfil de inversor del cliente, encontrando el conservador, moderado, decidido y muy arriesgado. Este sistema está hecho para que el inversor pueda evaluar sus circunstancias personales en el momento de la inversión, según el riesgo que esté dispuesto a asumir en la búsqueda de rentabilidades.

En base a estos perfiles, CRC presenta el fondo de inversión Rural Sostenible Conservador, FI, dirigido a aquellos que están dispuestos a soportar pocas oscilaciones en el mercado, asumiendo un riesgo controlado, con una inversión en renta variable que no excede el 20%, y el resto en renta fija pública o privada. Se gestiona con el objetivo de que la volatilidad máxima sea inferior al 2% anual.

Por su parte, Rural Sostenible Moderado, FI, cuyo perfil admite oscilaciones en el corto plazo, asumiendo un cierto riesgo, por lo que cuenta con una inversión en renta variable que no excede el 40%, y el resto en renta fija pública y privada. En este caso, la intención es que la volatilidad máxima sea inferior al 10% anual. Además, se trata de un fondo solidario, que dona el 2% de la comisión de gestión anual a ONGs.

Los fondos de inversión sostenibles de CRC se adecuan al perfil de inversor del cliente

Otras opciones son el Rural Sostenible Decidido en el caso de que el inversor tenga como objetivo la búsqueda de rentabilidad a largo plazo y esté dispuesto a asumir un nivel de riesgo superior. Y el Rural Futuro Sostenible, que invierte más del 75% de la exposición total en renta variable y el resto en renta fija pública/privada, aplicando criterios ASG. El fondo busca invertir en grandes tendencias actuales como mejora de la calidad de vida, transformación digital y descarbonización de la economía.

Cada uno de estos fondos de inversión sostenibles está diseñado con unas características distintas pero con un propósito común: cuidar de las personas y del medioambiente con inversiones socialmente responsables. Una buena idea consiste en buscar asesoramiento profesional antes de tomar una decisión sobre el destino de tu capital ahorrado, con el fin de asegurarte de que tienes todas las herramientas adecuadas según tu perfil de riesgo y tu capacidad financiera. Para ello, los gestores de CRC explicarán cómo realizar cada proceso y en qué fondo invertir según la situación personal del cliente.