El Banco Sabadell está valorando un posible recorte del número de afectados por el ERE que negocia con los sindicatos -inicialmente establecido en 1.936 personas, 237 de ellas en Alicante- y presentará su nueva propuesta en la reunión del próximo jueves. Así lo han confirmado fuentes cercanas al proceso, tras el nuevo encuentro que han mantenido este martes la dirección y los representantes de la plantilla, que ha coincidio también con una jornada de movilizaciones de los trabajadores en distintas ciudades del país.

En el caso de Alicante, de nuevo decenas de trabajadores y delegados se han concentrado en la tarde de este martes frente a la sede corporativa de la entidad en la avenida de Óscar Esplá, donde el banco tiene su domicilio social desde que lo trasladó por el desafío independentista en Cataluña. La protesta, que ha cortado la circulación de esta vía, ha ido acompañada de una sonora batucada.

Con estas prostestas los trabajadores han querido dejar claro su rechazo a un recorte de personal que consideran desproporcionado y que, a su juicio, no se justifica por las cifras económicas que presenta la entidad.

Así, después de que la dirección haya aceptado estudiar una revisión de la cifra inicial de afectados, los sindicatos han dejado claro que la rebaja debe ser "considerable" para que las salidas previstas se produzcan todas de forma voluntaria, la línea roja que han puesto sobre la mesa los representantes del personal. Además, insisten en que deben mejorar las condiciones económicas, tanto de las prejubilaciones, como de las bajas incentivadas, para que resulten atractivas a los posibles interesados.

En este sentido, desde CC OO ha recalcado que las indemnizaciones ofrecidas la semana pasada por la entidad "son una vergüenza" y han recordado que se encuentran muy lejos de las que el propio banco firmó hace solo unos meses. "Lo que no puede pretender la dirección es que este expediente sea un ERE low cost", han apuntado desde este sindicato, que considera que la negociación "no está avanzando como debería" y lamenta el "poco interés" mostrado por la dirección.

Unos argumentos muy similares a los que también ha empleado UGT, que igualmente califica como "insultantes" las condiciones ofrecidas y cree que el proceso no avanza.

Por su parte desde la Federación Sicam-Aprobas han lamentado que la dirección haya planteado la negociación del ERE como "un regateo", y exigen una nueva propuesta completa por parte del banco. Además, destacan el compromiso que han arrancado a la dirección de que no haya movilidad geográfica forzosa ni modificación de las condiciones laborales sustanciales de los que se quedan.

Desde los sindicatos insisten en sus propuestas para facilitar la voluntariedad, como las prejubilaciones y bajas "bien remuneradas", la elaboración de un plan de excedencias voluntarias remuneradas con garantía de retorno, la paralización del cierre de algunos centros, la inclusión en el proceso de cualquier empleado que voluntariamente quiera desvincularse de la entidad y la no limitación a colectivos por razones de edad o función.

Además, creen que en servicios corporativos puede existir mayor demanda de adhesión de personas mayores de 56 años que lo ofertado por el banco (262 plazas del total de 1.936 propuesto), por lo que han pedido que se permita la salida de todas las personas que lo soliciten y se creen ofertas internas para cubrir las vacantes.

Por su parte, la dirección se ha emplazado al próximo encuentro con la representación laboral para posiblemente presentar un ajuste en el número de plantilla afectada por la reestructuración, frente a la cifra actual de 1.936 empleos, en su voluntad de que las salidas se basen en la voluntariedad.

Sabadell justifica este ERE en la necesidad de seguir siendo competitivo y garantizar su sostenibilidad, lo que requiere de una reducción del desequilibrio funcional y geográfico en el perímetro identificado.

De nuevo, ha trasladado a los sindicatos que seguirá esforzándose para llegar al mejor acuerdo para los trabajadores y para la entidad, además de plantear un plan social que garantice el acompañamiento y la recolocación del 100% de las salidas por encima de los estándares del mercado.