Más negocio con menos oficinas. El importante recorte de sucursales que están acometiendo las entidades a lo largo de este año no se está traduciendo en una caída de sus cifras, al menos en el caso del Sabadell. A pesar de que la entidad ha bajado la persiana o ha reducido los horarios de casi una cuarta parte de red en lo que va de ejercicio, el banco presidido por Josep Oliu ha conseguido elevar de forma considerable sus cifras de contratación.
Así, en el caso de la provincia de Alicante, durante los primeros nueve meses del año el Sabadell ha concedido hasta 2.587 hipotecas, por un importe conjunto de 279 millones de euros, lo que supone un incremento del 23% en cuanto al número de operaciones y del 28%, si lo que se mide es el volumen de dinero prestado, de acuerdo con la información facilitada por la propia entidad. Igualmente, la cifra de seguros contratados ascendió a 176.841, que sumaron unas primas de 189,8 millones de euros, un 24,4% más.
A ello hay que sumar un fuerte incremento de los préstamos personales, que contabilizaron otros 189,3 millones de euros frente a los 145 millones del año anterior. La única cifra que se mantuvo estable -en realidad, con un ligero retroceso del 1%- fueron los préstamos empresariales, que sumaron 3.025 millones, aunque hay que tener en cuenta que la cifra se compara con los nueve primeros meses del año pasado, cuando se produjo la avalancha de los ICO.
«En general, estamos viendo más actividad comercial pese a la reducción de oficinas. Puede parecer contradictorio, pero es la dinámica que se está produciendo», recalcó ayer el consejero delegado del Sabadell, César González-Bueno, al ser preguntado por las consecuencias de los cierres durante la rueda de presentación de los resultados del banco hasta el tercer trimestre. Un periodo en el que el Sabadell declaró unos beneficios de 370 millones de euros, un 82% más, gracias a esta mejora de sus ventas, las menores provisiones realizadas ante la recuperación de la economía y la entrada en beneficios de su filial británica, el TSB.
González-Bueno recordó que en los últimos años se han reducido más de un 66% las operaciones que se realizan en las sucursales y que la pandemia aceleró el paso de los clientes hacia los canales digitales. «España era uno de los países con más presencia de sucursales del mundo. Había un exceso de oficinas», señaló el directivo, que, además, aseguró «no tener la percepción de que se haya producido un aumento de quejas» por estos cierres.
Tamaño adecuado
En cuanto a los ajustes de personal -otra de las medidas de su plan de eficiencia-, González-Bueno descartó nuevos recortes masivos, una vez ejecutado el ERE que se acaba de pactar con los sindicatos. «No hay ninguna intención de hacer otro ERE en un futuro previsible. No está en el horizonte», recalcó el primer ejecutivo del Sabadell, a pesar de que la cifra finalmente acordada –el ajuste se cerrará si se alcanza 1.380 voluntarios- dista sustancialmente de los 1.935 planteados por la entidad inicialmente. Un ajuste que, en cualquier caso, se suma a las 1.800 salidas que se ejecutaron en el primer trimestre, lo que en total supondrá una reducción del 25% de la plantilla entre ambos procesos.
Al respecto, González-Bueno estimó que el Sabadell tiene en estos momentos un «tamaño muy bueno» en España, que les permite ser eficientes y también les da oportunidad para crecer. Así, desde el punto de vista del balance, recordó que maneja unos activos de unas 220.000 millones de euros, que les otorga unas cuotas «relevantes» en muchas áreas del negocio financiero, pero donde todavía tiene recorrido para incrementar su participación.
En cuanto al negocio en el exterior, el CEO de la entidad fue muy tajante y dejó claro que el banco ni siquiera está dispuesto a estudiar las posibles ofertas que le lleguen en este momento por su filial británica, el TSB. Unas palabras que se producen después de que este fin de semana trascendiera que la entidad había rechazado una propuesta de más de 1.200 millones de euros por parte de Co-operative Bank. La filial británica ya ha aportado en lo que va de año 82 millones a los beneficios del grupo y es una de las claves de la mejora en todos sus ratios. El directivo también descartó entrar en otros países mediante la banca electrónica.
