El acuerdo alcanzado con el convenio del metal en Cádiz no ha servido para destensar la cuerda en el caso de la provincia de Alicante. Y es que los sindicatos han vuelto a convocar dos nuevas jornadas de huelga, en este caso los días 3 y 10 de diciembre, con el objetivo de presionar a la patronal para que acceda a sus pretensiones, en el sentido de que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo como consecuencia de la subida de la inflación.
Había esperanzas depositadas respecto a un posible acercamiento de posturas, después de las dos jornadas de huelga celebradas los pasados días 18 y 23 de noviembre y la resolución del conflicto gaditano. Pero nada más lejos de la realidad. Los sindicatos van a seguir con las medidas de presión con el objetivo de ver satisfechas sus reivindicaciones.
José Rafael López, secretario de Industria de CC OO en las Comarcas Centrales, señala que «no vamos a cejar en nuestro empeño hasta conseguir una cláusula de revisión salarial que evite la pérdida de poder adquisitivo. Queremos que la patronal se tome en serio nuestras peticiones».
En parecidos términos se expresa el secretario de la Federación de Industria de UGT en l’Alacantí, Pedro Santiago, quien explica que «los empresarios nos han pedido que desconvoquemos la huelga del día 3 para sentarnos a negociar, pero la decisión está tomada y, además, hay margen suficiente en los días previos para intentar llegar a un acuerdo, si de verdad están abiertos a ello».
Por último, el secretario de la Federación de Empresarios del Metal de la Provincia de Alicante (Fempa), Luis Rodríguez, lamenta que «todos los intentos de aproximación hayan sido por nuestra parte, pero hay cuestiones en las que no vamos a transigir, porque el sector se encuentra en una situación complicada».
