Cuando un sector empieza a eclosionar son muchos los advenedizos que intentan subirse al carro para sacar tajada. Sin embargo, solo es cuestión de tiempo que se demuestre su falta de conocimiento y capacidades. Buen ejemplo de ello es la enésima y, por ahora última, "reconversión" del que fuera edil de Ciudadanos en Alicante, Juan Francisco Escudero, que antes y durante su paso por la política se autopromocionaba como el "community manager de las estrellas", para más tarde, ya sin cobrar del erario público, declararse seguidor de Vox, atribuirse el título de azote de los" progres de cristal" en Twitter y atreverse incluso a pedir dinero vía Bizum por ese supuesto "trabajo".
Tras ser vapuleado y ridiculizado, ahora ha cambiado su nombre en la red social del pájaro azul para pasar a ser John Squire (traducción al inglés de su nombre) y venderse como promotor de "proyectos serios de Play To Earn, Blockchain y Crypto Gaming".
Localiza su cuenta en Nueva York, cuyo skyline aparece en la foto principal, y presenta su perfil en inglés. Añade, incluso, una página web (JohnSquireNFT.com) que ni siquiera está operativa.
Escudero, ahora Squire, sigue con sus mensajes contra el Gobierno "socialcomunista", pero los combina con otros donde promociona criptomonedas y tokens de juegos Play To Earn. Advierte de que los tuits son opiniones suyas y no consejos financieros. Menos mal.
Porque uno de los primeros proyectos que ha venido publicitando en las últimas semanas, Cryptomines, del que decía ser "embajador en España", ha visto caer desde entonces su cotización un 99% y ha sido cancelado.
Para él era "el proyecto más serio e importante de los Play To Earn" y "lo mejor que nos ha pasado en la vida". Unas afirmaciones que sonrojan a cualquiera que conozca, aunque sea de manera superficial, el mundo de las criptomonedas.
Días después de que Escudero "apadrinase" el proyecto, CryptoMines canceló la compra y la venta de su token Eternal y "pospuso" el desarrollo de su videojuego NFT. El token fue lanzado en agosto de este año, cuando el mercado estaba eufórico, y ya con los metaversos en plena efervescencia alcanzó los 800 dólares. Este mes de diciembre, sin embargo, cayó un 99% y el proyecto ha quedado desmantelado.
"La gente ha perdido dinero y merece respuestas", ha señalado al respecto Jazelle Garzeski, una analista de videojuegos. Una de las razones del hundimiento de Cryptomines, según los medios especializados, ha sido la incertidumbre frente a la cantidad de tokens que tenían los desarrolladores del juego. Recientemente pasó algo similar con el token Squid Game, inspirado en la serie de Netflix "El Juego del Calamar", y acabó demostrándose que era una estafa millonaria.
No obstante, los responsables de Cryptomines anuncian el lanzamiento de otro nuevo token y el videojuego durante el primer trimestre de 2022, sin haber dado respuesta a las personas que han visto desaparecer sus fondos invertidos.
Pero John Squire a lo suyo:
La aventura criptográfica de Escudero ya comenzaba dando muestras de su escaso dominio de la jerga del sector (o del inglés o de la ortografía) cuando anunciaba a mediados de noviembre a la gente que les iba a enseñar a "ganar dinero jugando desde casa con los play-to-ear", es decir los "juegos para oír" en lugar de play to earn.
Tras ver la imparable caída del proyecto del que se nombraba como "embajador en España", volvió a meter la cuña de sus servicios de Community Manager en Twitter, donde estos días publicita otros juegos cripto e incluso hace supuestos sorteos de dinero:
Como indicamos en nuestra recientemente publicada guía para invertir en criptomonedas, realiza siempre tu propia investigación antes de poner tus fondos en cualquier proyecto y no te fíes nunca de las recomendaciones de pretendidos gurús o expertos. Respeta tu dinero.
