El Ingreso Mínimo Vital (IMV) se revalorizará un 3% en 2022, lo mismo que las pensiones mínimas y no contributivas, y medio punto más que las pensiones contributivas. De este modo, en el caso del IMV la renta garantizada para la unidad familiar compuesta por un adulto se situará en 5.899.6 euros.

Esta renta garantizada anual varía en función de la unidad de convivencia de acuerdo con la siguiente tabla:

  • Un adulto solo: La renta en 2022 será de 5.899,60 euros
  • Un adulto y un menor: La renta en 2022 será de 8.967,39 euros
  • Un adulto y dos menores: La renta en 2022 será de 10.737,27 euros
  • Un adulto y tres o más menores: La renta en 2022 será de 12.507,15 euros
  • Dos adultos: La renta en 2022 será de 7.669,48 euros
  • Dos adultos y un menor: La renta en 2022 será de 9.439,36 euros
  • Dos adultos y dos menores: La renta en 2022 será de 11.209,24 euros
  • Dos adultos y tres o más menores: La renta en 2022 será de 12.979,12 euros
  • Tres adultos: La renta en 2022 será de 9.439,36 euros
  • Tres adultos y un menor: La renta en 2022 será de 11.209,24 euros
  • Tres adultos y dos o más menores: La renta en 2022 será de 12.979,12 euros
  • Cuatro adultos: La renta en 2022 será de 11.209,24 euros
  • Cuatro adultos y un niño: La renta en 2022 será de 12.979,12 euros
  • Otros: La renta en 2022 será de 12.979,12 euros

Para llegar a un mayor número de beneficiarios, con el objetivo de duplicarlos hasta 1,6 millones, durante la tramitación de la ley en el Congreso, PSOE y Unidas Podemos pactaron la inclusión de un complemento para menores que recibirán los hogares que no superen el 300% de la renta garantizada del IMV para su tipo de hogar ni el 150% del umbral de patrimonio correspondiente a su tipo de hogar.

El complemento será de 100 euros por hogar al mes en el caso de niños hasta 3 años, de 70 euros al mes por cada niño entre 3 y 6 años, y de 50 euros al mes por cada menor de entre 6 y 18 años. También se incluyó reducir el plazo de antigüedad de la unidad de convivencia de 12 a 6 meses para acceder a la prestación y de 3 a 2 años de la acreditación de vida independiente en los casos de menores de 30 años.

Además, se va a convertir en permanente la posibilidad de solicitar el IMV por los ingresos del año en curso y se elevarán los umbrales de renta y patrimonio para estos casos, con el fin de que el IMV sea más sensible a las situaciones de pobreza sobrevenida.