Unicaja Banco dará salida con fecha 31 de marzo a los primeros 400 trabajadores adscritos al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) pactado con los sindicatos el pasado mes de diciembre. Según han explicado este miércoles las centrales sindicales tras reunirse con los representantes de la empresa en la comisión de seguimiento del ERE, la entidad financiera ha empezado a comunicar por correo electrónico esta fecha a los afectados, que iniciarán así el progresivo proceso de salida de los 1.513 empleados que se han apuntado al mismo. Cabe recordar que, entre las condiciones fijadas en el expediente, se estipulaba que el banco debería realizar un preaviso mínimo de 30 días.
El sindicato CSIF ha señalado que, según la información que se les ha facilitado, las salidas se producirán con periodicidad mensual y que la intención es "agilizar" el proceso. La empresa cerró el pasado 15 de enero el plazo para acogerse al ERE con 2.085 solicitudes recibidas, por lo que tuvo que rechazar así algo más de 550.
Según el CSIF, el colectivo de personas de entre 50 y 53 años cuenta con un plazo de tres días para comunicar a la empresa si quieren percibir la indemnización en forma de renta o capital, así como la fecha tope de jubilación y el cálculo de la renta mensual (61 a 63 años).
En abril continuarán los cierres de oficinas, ha añadido este sindicato, que afirma que en los traslados voluntarios tendrán prioridad los empleados afectados por la clausura de sucursales. La inmediatez de los traslados dependerá de cada plaza solicitada. La semana pasada ya se anunció de forma interna un plan de reordenación que contemplaba el cierre de 143 oficinas con el 18 de marzo como último día de servicio.
El plazo de ejecución de las medidas del ERE será hasta el 31 de diciembre de 2024. En cuanto a la provincia de Málaga, algunas estimaciones sindicales indicaban ya hace unas semanas que podría haber más de 150 peticiones de personal de oficinas en la provincia, mientras que las necesidades del ERE serían sólo de unas 100 salidas. Sin embargo, quedaría por saber el impacto del ERE en los servicios centrales, donde Málaga tiene muchos trabajadores (unos 1.000, repartidos entre Málaga capital y Ronda), y el número de solicitudes que ha habido en este apartado.
Los sindicatos, además, han venido mostrando durante estos meses su "temor" a que la dirección de la entidad pretenda en un futuro externalizar parte de los servicios centrales recurriendo a subcontratas pertenecientes al grupo y procedentes de la antigua Liberbank.
