El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este miércoles la apertura de una nueva línea de crédito del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) para facilitar liquidez a las empresas con facturas pendientes de pago por operaciones realizadas en Rusia o Ucrania. Así lo ha anunciado el propio Puig tras la reunión que ha mantenido con representantes sindicales y empresariales para analizar las consecuencias del conflicto sobre la economía de la Comunidad Valenciana.
El importe de la nueva línea de crédito ascenderá a un total de 10 millones de euros, con dos modalidades de préstamos. Por un lado, aquellas empresas que tuvieran aseguradas sus operaciones podrán solicitar que el IVF les adelante el importe de las facturas pendientes sin ningún tipo de interés, hasta que se produzca el correspondiente pago por parte de la aseguradora. Se espera que sea la modalidad más utilizada, ya que lo habitual es que las compañías aseguren sus operaciones de exportación.
Para aquellas empresas que no tuvieran póliza, la Generalitat facilitará préstamos a cuatro años, con los seis primeros meses de carencia y a un tipo del 0,75%. En el primer caso, para acceder al préstamo bastará con una declaración responsable de que la factura está asegurada, mientras que en el segundo se exigirá tener una calificación crediticia BB o, en su defecto, contar con una aval de AFIN SGR, que también se facilitarán.
Tal y como ha explicado el propio Puig, la medida pretende evitar que las empresas afectadas por el conflicto tengan problemas de liquidez, sobre todo teniendo en cuenta las tensiones de tesorería que ya ha provocado la pandemia en buena parte del tejido productivo.
La medida ha sido bien recibida por los representantes empresariales, entre los que había responsables de las Cámaras de Comercio, de la CEV, de la patronal hotelera Hosbec, Ascer (cerámica), Avia (automoción) o la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), que han trasladado al jefe del Consell su preocupación por las consecuencia de la guerra.
Así, los empresarios han solicitado a la Generalitat que traslade al Gobierno central la necesidad de adoptar medidas para frenar el nuevo incremento de los costes energéticos y también han reclamado ayudas para compensar los efectos de las sanciones económicas que la Unión Europea ha tomado contra Rusia en represalia por la invasión.
Además, en el caso del calzado, la presidenta de Avecal, Marián Cano, ha solicitado a la Generalitat un mayor esfuerzo en las ayudas a la internacionalización de las empresas con el objetivo de contrarrestar la posible caída de ventas. En este sentido, los empresarios temen que, más allá de la pérdida de los mercados ruso y ucraniano, la guerra acabe provocando un descenso del consumo en toda Europa, que afectaría notablemente al sector.
Al respecto, desde el Consell recuerdan que el Ivace ya ha puesto en marcha un servicio para ayudar a las empresas más afectadas a buscar mercados alternativos para la producción que destinaban a Rusia y Ucrania.
Igualmente, desde Hosbec han mostrado su preocupación por las posibles repercusiones que puede generar el cierre del espacio aéreo ruso, que obliga a desviar vuelos por corredores alternativos.
Por su parte, los secretarios generales de CC OO-PV, Ana García, y de UGT-PV, Ismael Sáez, también han solicitado al Consell que traslade al Ejecutivo central la posibilidad de poner en marcha medidas para proteger el empleo en las empresas más afectadas, al estilo de los ERTE por fuerza mayor que se aprobaron para la pandemia.
Impacto de 1.000 millones
Puig ha recordado que el conjunto de la Comunidad Valenciana exporta unos 260 millones de euros a Rusia y otros 92,5 millones a Ucrania. Sin embargo, el presidente del Consejo de Cámaras, José Vicente Morata, ha señalado que el impacto real de la guerra será mucho mayor que esta cifras y ha asegurado que la Comunidad afronta unos “problemas” económicos derivados del conflicto de cerca de 1.000 millones, si se tienen en cuenta los problemas que generará en la importación de materias primas, las subidas de la energía o el menor crecimiento de otros países clientes de la industria valenciana.
Al acuerdo también han asistido el conseller de Economía Sostenible, Rafa Climent, y el director del IVF, Manuel Illueca, entre otros.
Los hoteles se ofrecen para acoger refugiados
El vicepresidente de la patronal hotelera Hosbec, Javier Vallés, ha trasladado este miércoles a la Generalitat la disposición del sector a colaborar en lo posible en la atención a los afectados por el conflicto bélico en Ucrania. Al respecto, los establecimientos de la asociación ya están ofreciendo prolongar de forma gratuita las estancias de los clientes ucranianos a los que la guerra ha sorprendido en la Comunidad y tienen dificultades para regresar a su país. Además, los empresarios también han ofrecido su colaboración en el caso que desde el Consell o el Gobierno central necesiten sábanas, mantas u otro tipo de equipamiento similar para atender a los desplazados por el conflicto. Igualmente, desde Hosbec también han mostrado su disposición a colaborar con el alojamiento de los refugiados, si en un futuro desde la Unión Europea se organiza algún tipo de dispositivo para repartir a los afectados entre los distintos países, como ha ocurrido en anteriores crisis migratorias o como también se hizo durante la pandemia.
