La petrolera Cepsa obtuvo un beneficio neto de 661 millones de euros en 2021, frente a las pérdidas de 919 millones registradas en 2020, debido, entre otras razones, a la mejora de las condiciones de mercado, una vez digerida la peor etapa de la pandemia, así como al incremento de los precios del crudo.

Según ha explicado Cepsa este miércoles, también han contribuido a estos resultados las iniciativas de optimización impulsadas por la petrolera, que ha aprovechado para anunciar que comunicará su nuevo plan estratégico el próximo 30 de marzo, que abordará la transición energética que está llevando a cabo.

El resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado del ejercicio se situó en 1.815 millones de euros, un 53 % más que el año anterior, con avances en todas las áreas de negocio.

Así, en Exploración y Producción, el ebitda casi se duplicó, hasta alcanzar los 905 millones de euros, debido, principalmente, al incremento de los precios del crudo, un 70 % más caros que en 2020, "gracias a la recuperación de la demanda", dice la compañía.

En el negocio de Refino, el resultado bruto de explotación ajustado se multiplicó por nueve hasta alcanzar los 93 millones de euros, pese al impacto negativo del aumento de los precios del gas natural, especialmente en el cuarto trimestre del ejercicio.

Comercialización registró un aumento del 9 % en su volumen de ventas en línea con la recuperación de la demanda nacional de combustible, que se tradujo en un incremento del 19 % de su ebitda ajustado, hasta los 478 millones de euros, aunque no alcanzó los niveles previos a la pandemia.

El ebitda de Química aumentó un 29 % y alcanzó los 461 millones de euros, gracias al incremento del 5 % de los volúmenes de negocio y a la mejora de los márgenes y los precios.

Cepsa Química ha introducido materias primas renovables y recicladas en la producción de sus principales productos industriales, lo que supone un paso más en su compromiso con el desarrollo sostenible y con el cumplimiento de los objetivos medioambientales de sus clientes, explica la compañía.

En 2021 se produjo una reducción significativa de la ratio de apalancamiento de deuda neta sobre el ebitda, que pasó de 2,7 a finales de 2020 a 1,6 a finales de 2021.

A cierre de ejercicio, Cepsa mantenía una posición de liquidez de 3.476 millones de euros, "suficiente para cubrir los próximos 4,5 años de vencimientos de deuda", explica.

La petrolera recuerda, asimismo, su rechazo a la guerra de Ucrania, por lo que dejó de comprar crudo, gas natural y productos petrolíferos rusos el mismo día que empezó el conflicto, postura que no prevé modificar "en un futuro próximo".

También ha dejado de vender productos en ese país, donde tenía una actividad comercial "muy limitada".