El mercado de trabajo está resistiendo los primeros efectos de la guerra de Ucrania, según constata el avance de los datos de afiliación a la Seguridad Social presentado este miércoles por el ministro José Luís Escrivá. España, pese a la escalada inflacionista agudizada por el conflicto bélico y los problemas logísticos derivados, sigue creando empleo y a un ritmo similar al de ejercicios precedentes. "No es óbice para que el mercado de trabajo funcione bien y con contratos cada vez más indefinidos y con menos precariedad", ha destacado Escrivá. Es por ello que desde el Gobierno descartan "por ahora" activar las ayudas para ertes sectoriales más allá de las agencias de viajes.

"No se ve nada", ha insistido el titular de Seguridad Social, en referencia a las secuelas del conflicto bélico, pese a que a reglón seguido ha reconocido la alta volatilidad del escenario y que desde el Ejecutivo están monitorizando los datos por si se ven obligados a activar nuevas medidas. La estadística sí muestra un primer impacto de la guerra en el sector de la automoción, donde ha habido un repunte de los ertes por casusas productivas que afectan a unas 3.000 personas. No obstante, Escrivá ha destacado que el impacto, de momento, está siendo menor que el que tuvo inicialmente la falta de semiconductores el año pasado.

Durante los primeros 14 días de marzo la afiliación ha crecido a un ritmo similar al periodo 2017-2019, antes del impacto del covid, y la Seguridad Social registra 81.762 ocupados más que el último día de febrero. A esta cifra cabrá restar el efecto de final de mes, cuando muchas empresas finiquitan contratos temporales, y el componente estacional. El resultado avanzado por Escrivá será de una creación neta de empleo de 30.520 ocupados más que el mes anterior. Algo que dado el "entorno internacional extraordinariamente complejo supera claramente las expectativas", ha destacado el ministro.

Empleo de mayor calidad

Los datos presentados por Escrivá constatan que el aumento de la contratación indefinida registrado desde la entrada en vigor de la nueva reforma laboral continúa. El transito del contrato temporal al fijo discontinuo -una de las vías promovidas por la reforma- explica parte de esa ganancia de indefinidos. En lo que va de año hay 60.000 afiliados fijos discontinuos más que en el ciclo 2017-2019.

Otro dato que explica la reducción en la firma de contratos temporales es que los que se firman, duran más. El 48,5% de los contratos eventuales firmados este año continúan vigentes, cuando en el mismo periodo del 2019 dicho porcentaje no superaba el 11%. Y si antes de la reforma la duración media de un eventual era de 8,6 días, ahora dicha media está en 10,5 días.